Colombianos eligen a un alcalde en prisión

Ni Gabo habría imaginado a un prisionero convertido en alcalde del pueblo. Mucho menos tratándose de un exvendedor de ropa interior que se dedicó a repartir tierras sin permiso entre los desfavorecidos Se le acusa de fraude y apropiación ilegal de terrenos

Colombianos eligen a un alcalde en prisión

Autor: Patricio Araya

En Yopal, una ciudad de 150 milalcalde colombiano habitantes en el oriente de Colombia, conocida por ser una joya en la explotación de petróleo, el alcalde elegido en la jornada electoral del domingo está en la cárcel.

Se llama John Torres, pero le dicen John Calzones porque durante mucho tiempo, antes de hacer política, se dedicó a vender ropa interior femenina. Ni su pasado como comerciante ni su actual situación de encierro han impedido, sin embargo, que haya conseguido más del 34% de los votos en su ciudad.

Calzones, el alias que también emplean las autoridades para referirse a él, fue capturado el pasado 14 octubre en plena campaña electoral. Se le acusa de apropiarse de terrenos de forma ilegal y de fraude por lo que se enfrenta a una pena de entre tres y siete años de prisión. Y aunque muchos creyeron que cuando lo enviaron a la cárcel La Modelo de Bogotá, su carrera política se había arruinado, ocurrió todo lo contrario. Desde allí, envió un mensaje de audio que fue reproducido una y otra vez en su ciudad: “Estoy en La Modelo pero con honor porque mi delito fue servirle al pueblo. Los invito para que voten el próximo 25 de octubre, necesito 70.000 votos para demostrarle a la justicia que no soy un peligro para Yopal”.

De sus palabras se desprende esa particular concepción de Robin Hood que el político tiene de sí mismo. Durante varios años se ha dedicado a regalar casas y lotes de tierra a las personas de bajos recursos de su ciudad. Son esos terrenos, pertenecientes a la Fiscalía, la principal razón por la que ahora se enfrenta a juicio y las prebendas que, al mismo tiempo, le han dado el respaldo electoral.

Al reparto de tierras entre los desfavorecidos se une su habilidad para hacer de su historia vital una estrategia de marketing capaz de convencer al pueblo y vencer a sus oponentes. Calzones es un hombre sin estudios secundarios que ha conseguido convertirse en una de las personas más ricas de Yopal con un negocio de ropa interior. El periodista colombiano Simón Posada, autor de un perfil sobre este alcalde para la revista Don Juan, describe a un hombre de 39 años, víctima de varios atentados, que se obsesionó con ser regidor de su ciudad y por eso no dudó en repartir a manos llenas casas, terrenos y dinero.

“Mis oficinas están abiertas. Yo me mantengo en pantaloneta, descalzo, sencillo, sin ningún problema”, respondía hace unos meses a Posada cuando se le planteaban cómo era posible que de un negocio de calzones sacara el dinero para construir casas para regalar a 10.000 familias y por valor de más de 12 millones de dólares. “Yo compré esa finca porque es el lugar más alto que tiene Yopal. Al lado está esa estatua de la Virge, y el pueblo se ha vuelto idólatra y han ido a venerarla. Y como yo soy un hombre cristiano quiero hacer la Biblia más grande del mundo para darle el puesto más alto a Dios”, se justificaba al hablar de una de sus tantas propiedades.

El futuro político de Calzones depende de la justicia. Si el caso se resuelve antes de enero y queda en libertad podrá tomar posesión de su cargo, de lo contrario el Gobierno nacional deberá elegir a un mandatario encargado hasta que se resuelva su situación jurídica. A la espera de una conclusión judicial, el futuro del político pasa, según sus deseos, por saltar de lo local a lo regional. No sería nada raro que en cuatro años se conviertiera en el gobernador de su departamento. Ese, ha dicho, también es su sueño.


Reels

Ver Más »
Busca en El Ciudadano