La Fiscalía de Nueva York, Estados Unidos, confirmó la existencia de una investigación abierta contra el presidente de Honduras, Juan Orlando Hernández, por su presunta implicación en un caso de narcotráfico.
«Las quejas del acusado (el narcotraficante hondureño Geovanny Fuentes Ramírez) sobre la investigación del Gobierno ignoran las realidades de desarrollar evidencia de tráfico de drogas y actos de violencia en Honduras en relación con una investigación dirigida, entre otros, a funcionarios de alto rango como CC-4 (Hernández)«, señala el documento judicial al cual tuvo acceso El Heraldo.
Fuentes Ramírez enfrentará en la urbe estadounidense en marzo la acusación, entre otros ilícitos, de tráfico de cocaína en neumáticos de aviones que partían desde la ciudad de San Pedro Sula, capital económica de Honduras.
El mismo informe de la Fiscalía neoyorkina identifica a CC-4 como el mandatario de Honduras y revela que en 2013 Fuentes Ramírez contribuyó con grandes sumas de dinero del narcotráfico a la campaña presidencial de Hernández, señala el diario.
A cambio, el futuro mandatario prometió proteger al acusado del arresto y la extradición, agregó la publicación.
El 8 de febrero la Casa Presidencial hondureña refutó a través de la red social Twitter la versión que implica al mandatario con actos de corrupción vinculados al narcotráfico internacional.
La sede ejecutiva ya había desmarcado el 9 de enero al jefe de Estado de similares acusaciones de fiscales estadounidenses que lo vinculaban con Fuentes Ramírez, quien fue arrestado el 1 de marzo del 2020 en Miami.
A cambio de protección para el narcotraficante, el político hondureño habría aceptado una suma de 25.000 dólares, indicaron entonces los mismos fiscales, además de malversar dinero de asistencia ofrecido por EE. UU. a través de organizaciones fraudulentas sin ánimo de lucro.
Fuente: agencia Sputnik.