La República de Cuba celebrará este año medio siglo de la fundación de su ciudad capital, La Habana.
Diversas actividades se han programado para celebrar el histórico acontecimiento. Algunas de ellas vinculadas con el sector turismo, el segundo motor que mueve la economía en la isla.
Para el 2019 las autoridades cubanas se han propuesto lograr la cifra récord de recibir 5 millones de visitantes extranjeros. Alcanzar esta meta no es nada fácil, por ello se erigen nuevos espacios hoteleros que sumarán 5.250 nuevas habitaciones a su oferta turística y brindarán opciones de alta calidad al exigente viajero de hoy.
Estas capacidades se encuentran actualmente en construcción y se unirán a las más de 5.000 que deben quedar listas antes de que acabe el año, aseguró el ministro cubano de Turismo, Manuel Marrero, citado por la estatal Agencia Cubana de Noticias.
Marrero, que encabeza una fuerte campaña de promoción turística en importantes eventos del sector en Europa, adelantó que el país caribeño comenzará a construir un nuevo hotel cinco estrellas de lujo en Cayo Largo, un islote paradisíaco al sur del archipiélago.
Entre las recientes adiciones a la planta hotelera del país, el titular destacó el recién inaugurado Hotel Packard en La Habana Vieja, administrado por la cadena española Iberostar, y el Internacional de Varadero, de próxima apertura en el balneario más famoso de la isla.
Cuba experimentó un auge turístico en los últimos años, en coincidencia con el «deshielo» diplomático con Estados Unidos, iniciado en diciembre de 2014.
En 2016, por primera vez en su historia, la isla recibió un récord de 4 millones de visitantes, cifra que rebasó en 2017 y espera también sobrepasar este año, a pesar de la seria disminución en las llegadas de viajeros estadounidenses debido a las restricciones impuestas por el Gobierno del presidente Donald Trump.
Para ello, los cubanos impulsan una fuerte campaña dirigida a Rusia, Europa y Latinoamérica, los mercados emisores de más rápido crecimiento en los dos últimos años.
Ante el incremento en las visitas y el desbordamiento inicial, el Gobierno inició una serie de inversiones que incluyen la construcción de nuevos hoteles, la mayoría de ellos en La Habana, que recibe aproximadamente la mitad de los turistas que llegan al país.
El ministro de Turismo señaló que su gestión apoya la ampliación de los contratos de administración hotelera con socios extranjeros y subrayó que trabajan para elevar la calidad del servicio, uno de los principales problemas detectados en las opiniones de los turistas según un estudio de The Havana Consulting Group (THCG).
Marrero recordó que ya fue aprobado un contrato con la compañía francesa Aeropuertos de París para la administración del aeropuerto internacional José Martí de La Habana, la principal puerta de entrada a Cuba.
Anunció también que «aunque se han retrasado, se aceleran las gestiones y firmas de contratos para la adquisición de 8.000 nuevos autos para la renta» a turistas, una cuestión fundamental debido al poco fiable e insuficiente transporte público en el país caribeño.
En Cuba existen hoy unas 70.000 habitaciones de hotel, de ellas el 63 % en instalaciones de cuatro y cinco estrellas y el 74 % ubicadas en playas, según datos oficiales.
El 65 % del total de las capacidades está operado por sociedades mixtas conformadas por compañías extranjeras y empresas estatales cubanas.
Esta cifra no incluye las casas de renta privada, operadas por los trabajadores por cuenta propia, que sumaban en 2017 unas 21.000 en toda Cuba.
El turismo es la segunda fuente de ingresos de Cuba por detrás de la venta de servicios profesionales al exterior, lo que supone una contribución del 10 % al producto interior bruto, el PIB, y la generación de medio millón de empleos.
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