El Instituto Socioambiental (ISA) de Brasil alertó que en tres años de la gestión gubernamental del presidente brasileño Jair Bolsonaro, se registró un incremento de 138 por ciento de la deforestación en tierras indígenas.
De igual manera, el ente indicó un aumento del 79 por ciento de la deforestación de áreas protegidas de la Amazonía, por lo que instó a las autoridades a implementar políticas para la preservación del medio ambiente, publicó Telesur.
En un artículo reseñado por el Instituto Sociambiental se precisó que un año antes de ser electo, Bolsonaro advirtió durante una visita al estado de Mato Grosso, que durante su Gobierno las Tierras Indígenas no tendrían “un centímetro cuadrado demarcado”.
En los últimos tres años, mucho más allá de cumplir su ominosa promesa, el presidente ha lanzado una verdadera ofensiva contra los derechos de los pueblos indígenas, avanzando en lo que es más valioso para su existencia: la tierra”, remarcó el ISA.
Por su parte, el sistema Prodes, del Instituto Nacional de Investigaciones Espaciales (Inpe), notificó que la deforestación en la Tierra Indígena Trincheira-Bacajá, ubicada en el estado brasileño de Pará, ascendió a 51 por ciento en comparación con 2020, una cifra que representa más de 3.500 hectáreas taladas en el último año, a pesar de que este ente solo registra la deforestación talada, es decir, la deforestación total de la vegetación nativa.
«Los procesos de invasión y degradación forestal, producto del robo de madera, la minería ilegal y el incendio no son contemplados por Prodes», confirmó el coordinador del Programa de Áreas Protegidas del ISA, Antonio Oviedo.
Oviedo agregó que además de las 32.864 hectáreas de deforestación registradas por el sistema Prodes en 2021, otras 22.707 hectáreas fueron degradadas en las Tierras Indígenas. A diferencia de la deforestación talada registrada por Prodes, la degradación forestal aumentó 55 por ciento en las Tierras Indígenas en 2021.
El Instituto alertó que hay presencia de acaparamiento de territorios, “donde los invasores ganan espacio en las tierras indígenas en lotes vendidos, subastados o incluso donados de forma irregular por redes criminales”.
De igual manera, la investigación realizada por Inpe refirió que la deforestación en Tierras Indígenas aisladas creció exponencialmente, la degradación aumentó en un 245 por ciento en el actual gobierno, entre 2020 y 2021.
Las Tierras Indígenas más impactadas son Piripkura e Ituna-Itatá, ubicadas en los estados brasileños de Mato Grosso y Pará, respectivamente, apuntó el informe presentado por Instituto Socioambiental.
El Sistema de Alerta de Deforestación (SAD) del Instituto Amazónico para el Hombre y el Medio Ambiente (Imazon), había notificado que de enero a noviembre de 2021, la Amazonía perdió 10.222 kilómetros (km²) de bosque, un área equivalente a siete veces la ciudad de Sao Paulo.
El ente también indicó que este es el más alto acumulado en los últimos 10 años para el período, siendo un 31 por ciento superior al del año pasado, también en el período presidencial de Jair Bolsonaro.