Estudiantes de la Universidad Pública de El Alto (UPEA), situada en Bolivia anunciaron que se agudizarán las protestas contra el Gobierno de Evo Morales, a pesar de que ha sido detenido un policía por ser presuntamente ser el causante de la muerte de un joven manifestante (Jonathan Quispe) con una cánica de vidrio.
Salvador Quispe, vocero estudiantil explicó que las autoridades, docentes, administrativos y estudiantes de la UPEA acordaron profundizar las protestas contra el Gobierno de Morales y exigir «enjuiciamiento a los responsables intelectuales de la muerte de nuestro compañero, además de la renuncia de los ministros de Gobierno y de Economía».
Los asistentes a la asamblea que se llevó a cabo en una avenida cercana donde tres miembros de la universidad ejecutan una huelga de hambre, decidieron quitar el título de honoris causa entregado al presidente Morales hace diez años.
El representante estudiantil indicó que la renuncia de los ministros incluyendo el de Gobierno, Carlos Romero debe concretarse debido a que es «responsable de la represión que mató a nuestro compañero y porque ha mentido en sus primeras versiones sobre ese crimen». Mientras que el ministro de Economía, Mario Guillén ha sido identificado por los participantes en la asamblea como «el primer responsable del conflicto, porque desde hace un año no resuelve la demanda presupuestaria», aseguró Quispe.
Entre las demandas en las protestas efectuadas desde hace tres semanas, los manifestantes piden una asignación extraordinaria inmediata de más de 100 millones de bolivianos para cubrir supuestamente deudas salariales y otros gastos urgentes.
Autoridades universitarias en las protestas señalaron que las Casas de Estudios estatales de Bolivia se financian con los impuestos ordinarios y de hidrocarburos, así como mediante las asignaciones directas del Tesoro Nacional.