El Gobierno de facto de Bolivia y sus unidades ejecutoras en los niveles nacional, departamental y municipal adeudan al sector constructor más de mil millones de bolivianos (USD 144.734.300,00 ) en planillas atrasadas, así lo denunció este martes el titular de la Cámara Departamental de la Construcción de La Paz (Cadeco La Paz), Luis Bustillo, difunden medios locales.
“Tenemos reportes de empresas en Cochabamba a las cuales se les debe 340 millones de bolivianos; en Tarija las deudas llegan a los 450 millones de bolivianos, mientras que en Santa Cruz se deben cerca de 200 millones de bolivianos. Sólo sumando esas tres deudas se tienen casi mil millones de bolivianos”, señaló el ejecutivo del sector, cita Página Siete.
El presidente de Cadeco indicó que es casi imposible cuantificar lo que realmente deben, porque aún no se conocen las deudas que tiene la Unidad de Proyectos Especiales (UPRE) con las empresas por las obras del programa “Bolivia cambia, Evo cumple».
Bustillo acotó que desde septiembre del año pasado no se cancelaron las planillas en casi la totalidad de las obras, “A la fecha, desde septiembre no se han cancelado las planillas de ejecución de obras y en el transcurso de los anteriores años ha habido entidades que han cancelado dos planillas anuales, cuando los pagos, según norma, deberían ser mensuales”, dijo.
La situación, según la declaración de Bustillo, ha dejado vulnerable a una gran cantidad de empresas, al destacar que han estado a punto de declararse en quiebra, esto, por los gastos que han tenido que asumir.
En este sentido, el presidente de la Cámara Boliviana de la Construcción (Caboco), Franklin Pérez, sostuvo que todo el costo financiero, laboral e impositivo que generan las planillas impagas es absorbido por las empresas constructoras, difunde Página Siete.
Pérez agregó que ya no pueden acceder a créditos y se les han acabado los recursos, por lo que han optado por vender los equipos, “Estas son situaciones que ponen en riesgo nuestro patrimonio y han dejado a casi el 50% de las 16.000 empresas que tenemos registradas en problemas”.
Esta situación en la nación andina ha arrojado una disminución en la fuente de empleo, así lo puntualizó Pérez, “La generación de empleos del sector se vio afectada al pasar de 650 mil, a principios de 2018, a menos de 350 mil empleos a fines del año pasado”.
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