Pese a la petición voluntaria en abril de 2017, de Venezuela sobre su salida de la Organización de Estados Americanos, el gobierno de Donald Trump, continúa las presiones para suspender al país Bolivariano durante la próxima Asamblea General a celebrarse en Washington este lunes 4 y martes 5 de junio.
Durante una entrevista realizada por Efe, al embajador estadounidense ante el organismo, Carlos Trujillo, señaló que Estados Unidos está presionando a los países del Caribe, tradicionales aliados del Gobierno de Nicolás Maduro, para que apoyen la suspensión de Venezuela en la Organización de Estados Americanos.
Estados Unidos necesita 24 votos para aprobar la suspensión de Venezuela, lo cual ha sido implementado en 2 naciones hasta ahora, Honduras, en 2009, luego del golpe de Estado que depuso a Manuel Zelaya como presidente; y a Cuba tras el triunfo de la Revolución de Fidel Castro, en 1959.
Al respecto, la representante de la Coalición Venezolana Giselle Jiménez, destacó este domingo que “la diplomacia coercitiva acentúa el unilateralismo y desprecia los espacios colectivos y democráticos de integración regional para la solución pacífica de controversias entre los Estados» haciendo referencia a las estrategias utilizadas por EEUU contra Venezuela dentro de la Organización mundial.
La “herramienta diplomática” expresó Jiménez, “es una tendencia que vulnera la Carta de la OEA y supone olvidar el largo camino avanzado por la comunidad internacional para asegurar la paz”.
En palabras del embajador de Venezuela ante la Organización de Estados Americanos(OEA), Samuel Moncada, el gobierno norteamericano ha utilizado al organismo para mantener un asedio y ataque constante contra la nación Bolivariana.