El juez federal Heraldo Nader, de la 6ta Vara Federal de Campinas, Sao Paulo, suspendió este jueves los derechos de Luiz Inácio Lula da Silva como expresidente de Brasil, por lo que ordenó que se retiraran a los cuatro guardias de seguridad, dos conductores y dos asesores con los que contaba.
La orden corresponde con una solicitud realizada por una acción popular presentada por el abogado Rubens Nunes y coincide con el cumplimiento de los 40 días de prisión de Lula en la cárcel de Curitiba, reseñó en una nota Telesur.
Nader justificó la medida con el alegato de que «el expresidente está bajo custodia permanente del Estado, en sala individual, o sea bajo protección de la Policía Federal, que le garantiza mucha más seguridad de lo que había tenido cuando estaba libre».
La retirada de los autos también fue justificada con que Lula solo iría a algún lugar bajo la custodia de la Policía Federal. «En cuando a los asesores, el despacho informa que no hay justificación razonable, ya que el expresidente está detenido, apartado de los quehaceres normales, actividad política, profesional e incluso social», explicó.
De acuerdo a la Ley n° 7.474 de 1986, una vez un presidente haya terminado su mandato tiene derecho a utilizar los servicios de cuatro servidores, para seguridad y apoyo personal, así como dos vehículos oficiales con conductores, todo costeado con créditos propios de la Presidencia de la República.
Por lo que la defensa de Lula alega que ningún juez puede retirar derechos y prerrogativas instituidas por Ley a ningún exmandatario de la República.
Añadieron además que existen dictámenes sobre la materia que aseguran que las prerrogativas son vitalicias y no comportan ningún tipo de excepción.