Luego que las elecciones presidenciales en Argentina decretaran que habrá, por primera vez en la historia, un balotaje entre Daniel Scioli y Mauricio Macri, del frente Cambiemos, los partidos de izquierda salieron a sentar su postura, la cual no fue unificada.
El Frente de Izquierda y de los Trabajadores (FIT), quien llevara a Nicolás Del Caño como candidato a presidente y quedara en cuarto lugar a nivel nacional, llamó a votar masivamente en blanco. El FIT dejó en claro que consideran a Scioli y Macri como los «candidatos del ajuste», y por eso llamó a no optar por ninguno de los dos en segunda vuelta. «La candidatura del derechista Scioli le dio paso al fortalecimiento de Macri. Así termina la década ganada» , fue uno de los tweets de Del caño.
En esa misma dirección, Alejandro Bodart del Movimiento Socialista de los trabajadores (MST) afirmó: «Ante el balotaje no hay dos opciones, sino tres. A cientos de miles no nos representan para nada dos candidatos que, estilos aparte, comparten las políticas de fondo. Macri y Scioli coinciden en alentar la megaminería y demás corporaciones, ajustar la salud y la educación públicas, mantener la precarización laboral, negar el derecho al aborto y preparar devaluación y tarifazos”.
Sin embargo, esta postura no es la única que existe entre los partidos de Izquierda.
Itai Hagman, del frente Patria Grande subrayó -en declaraciones a radio Télam y Radio América- que votará a la fórmula del Frente para la Victoria (FpV) a pesar de creer «que el candidato oficialista (Daniel Scioli) representa lo más conservador de esa fuerza», ya que «no me da lo mismo que gobierne el PRO».
Desde el Partido Comunista Congreso Extraordinario (PCCE), histórico aliado del kirchnerismo, también llamaron a votar por el FpV, bajo el lema de «Kirchner es pueblo, Macri es desocupación. Scioli presidente». Lo mismo sucedió con Socialistas para la Victoria, partido presidido por el Diputado Nacional Jorge Rivas, quien llamó a votar a Daniel Scioli.
Así, una vez más en la historia de los movimientos de izquierda latinoamericanos y argentinos, este sector político no tiene una visión en conjunto y se dividirá entre el voto en blanco y el voto al candidato kirchnerista, ante la posible amenaza que representaría un futuro gobierno de Mauricio Macri.
Cabe aclarar, por último, que cada voto pertenece a cada votante, así que por más declaraciones orgánicas que se manden, dependerá de cada ciudadano la decisión del voto.