La Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco), dedicó este día, al punto cubano, género musical y poético que ha sido incluido recientemente en la lista representativa del Patrimonio Inmaterial de la Humanidad.
Durante la velada en su sede parisina, el poeta, narrador, ensayista y profesor universitario, Fidel Antonio Orta, definió esta tradición en la isla como “un acontecimiento musical y poético, donde hay magia, sabiduría, pasión y también puesta en escena”.
Explicó que las raíces del género, se deben a la poesía que siempre lo acompaña en forma de décima, el cual llegó a Cuba por influencia de los españoles.
Orta manifestó que el punto surgió y se consolidó principalmente en el centro y el occidente de la nación cubana, y tiene la particularidad de que la música tocada en instrumentos de cuerdas como el laud y el tres acompaña a los repentistas, quienes entonan décimas improvisadas.
Detalló que los isleños son “muy estrictos con la estructura clásica de la décima, no admiten ninguna asonancia y se ha convertido en la estrofa nacional».
Dijo que los cantantes improvisan, lo que quiere decir que “hay un retorno a los inicios de la poesía, que era la poesía oral».
Destacó que la figura del género más importante en la isla, Jesús Orta Ruíz conocido como el Indio Naborí, quien legó una vasta obra, donde la décima no sólo rima sino que es poesía.
En la actividad intervino la embajadora de Cuba en la Unesco, Dulce Buergo, quien mencionó el valor que el país concede a la inclusión del punto en la lista de Patrimonio Inmaterial.
A su vez, enalteció el arraigo del género en comunidades que lo trasmiten a generaciones así como los programas educativos y culturales dirigidos a fomentarlo.
Entretanto, Lisa Gisbert, especialista del programa de la Convención de Patrimonio Inmaterial preponderó los valores del punto como la “utilización de la fuerza de la palabra y la expresión de la música permiten contar su historia y sus tradiciones”.