A una década de la desaparición forzada de los 43 de Ayotzinapa, el cuadro no termina de formarse

A pesar de que se ha avanzado con la investigación, que desde su inicio fue obstaculizada por el gobierno mexicano, los hechos se encuentran lejos de esclarecerse en su totalidad.

El Ciudadano México

26/09/2024 8:38pm

Se ha cumplido ya una década de la desparición forzada de los 43 estudiantes de Ayotzinapa. A pesar de que se ha avanzado con la investigación, que desde su inicio fue obstaculizada por el gobierno mexicano, los hechos se encuentran lejos de esclarecerse en su totalidad. De la mayor parte de ellos, su paradero definitivo aún no se confirma.

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En el ámbito de la prensa mexicana, el particular constituye un “tema delicado”, pues tanto desde las redacciones como desde las lectorías, el acontecimiento suele suscitar fuertes emociones. Muchos periodistas que quieren pasar por “comprometidos” asumen que, cuando se refieren al episodio, deben mostrar una enorme indignación. Buscar el justo medio ante el tema de los 43 suele considerarse una actitud tibia y timorata. Es un asunto sobre el que escribir, francamente, intimida; es de esos temas sobre los que formarse una opinón es como caminar sobre delgado hielo.

Así, mientras que algunos medios se plegaron, sin más, a la “verdad histórica” gubernamental (que tan estrepitosamente colapsó), otros medios se volvieron portavoces y hagiógrafos de la Normal Rural Isidro Burgos; dos militancias contrapuestas, aunque ninguna de ellas orientada a la verdad, ninguna de ellas encaminada a presentar a su audiencia narrativas balanceadas.

Por otra parte, los acontecimientos se han internacionalizado, aunque las narraciones sobre los 43 que han llegado al extranjero suelen ser aún más incompletas que las que posee la audiencia mexicana. En ellas suele faltar, por ejemplo, el historial combativo que caracteriza a la Normal Isidro Burgos, y los consecuentes enfrentamientos que sus alumnos han tenido, desde mucho antes de 2014, contra las fuerzas policiacas, con motivo de la toma de carreteras, o el robo de gasolina y de mercancía a vehículos de carga; guste o no guste su mención, estas acciones forman parte de la actividad cotidiana del alumnado de las normales rurales, y muy en especial la Isidro Burgos. Por ello, cuando en el extranjero leen sobre “un convoy policiaco que atacó un autobús de estudiantes”, el asunto les parece inexplicable.

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Pero el asunto tiene una explicación, aunque por el momento dicha explicación no pueda ser otra cosa que inconclusa o aproximativa, en buena parte por el encubrimiento deliberado ordenado desde el poder mexicano. A continuación, se presenta una escueta relación cronológica de aquello que hasta hoy se conoce sobre aquel trágico acontecimiento acaecido el 26 de septiembre de 2024.

2014

26 de septiembre de 2014. Estudiantes de la Normal Rural Isidro Burgos, en Ayotzinapa, toman por la fuerza 7 autobuses de pasajeros en la ciudad de Iguala, Guerrero. Se trata de los autobuses 1568 y 1531 Estrella de Oro; 2513, 2012 y 2510 de Costa Line; 3278 de Estrella Roja; y 99 de Castro Tours. Llevaban varios días tomando autobuses y acumulando gasolina en la Normal Rural para viajar el 2 de octubre a la Ciudad de México y participar en las actividades conmemorativas del 2 de octubre. A las 21.30 horas, cuatro de los autobuses son interceptados por una patrulla. Algunos de los estudiantes bajan y uno de ellos -Aldo Gutiérrez Solano- se trenza en un combate físico con un policía; segundos después, una bala le perfora el cráneo y aunque no consigue privarlo de la vida, sí lo deja permanentemente postrado. Daniel Solís Gallardo, otro de los estudiantes, sí resulta ejecutado. Al escuchar las detonaciones, algunos de los estudiantes huyen. Llegan refuerzos policiacos al lugar y aprehenden a los estudiantes que no descendieron del camión. Tras recibir la alerta del ataque, los alumnos y maestros a bordo de los otros tres camiones llegan al lugar donde fueron interceptados los primeros 4 camiones. Tras algunos minutos de buscar compañeros y dar declaraciones a la prensa, llegan personas armadas con metralletas y les disparan ráfagas, aniquilando a los estudiantes Julio César Ramírez Nava y Julio César Mondragón.
27 de septiembre de 2014. Es localizado el cadáver de Julio César Mondragón Fontes, sin piel en la cara y con los ojos arrancados. La procuraduría de Guerrero abre una investigación.
28 de septiembre de 2014. El Centro de Derechos de la Montaña Tlachinollan denuncia la desaparición de 55 personas, atribuida al estado mexicano. La autoridad de Iguala culpa al cártel Guerreros Unidos por los acontecimientos. 22 policías de Iguala resultan detenidos.
1 de octubre de 2014. Huyen de Iguala el alcalde José Luis Abarca y su esposa María de los Ángeles Pineda; previamente había intentado deslindarse de los hechos aduciendo que la noche del 26 “estaba bailando” en un evento del DIF municipal, presidido por su esposa.
6 de octubre de 2014. La Procuraduría General de la República, encabezada por Murillo Karam, abre su propia investigación. Sin embargo, hoy se sabe que previamente se habían acordado junto con el expresidente Enrique Peña Nieto y otras autoridades las conclusiones a las que debía conducir dicha investigación, mismas que serían denominadas “la verdad histórica”.
10 de octubre de 2014. Jesús Murillo Karam informa la detención de 4 personas relacionadas con el caso Ayotnizapa, así como el hallazgo de un cuarteto de fosas comunes en Guerrero.
17 de octubre de 2014. Murillo Karam informa la detención de Sidonio Casarrubias Salgado, presunto líder del cártel Guerreros Unidos.
23 de octubre de 2014. . Renuncia el gobernador del estado de Guerrero, Ángel Aguirre.
29 de octubre de 2014. Se reúnen las familias de los estudiantes desaparecidos con Enrique Peña Nieto.
4 de noviembre de 2014. El presidente municipal y su esposa son detenidos en la Ciudad de México.
7 de noviembre de 2014. El gobierno mexicano establece que el cártel Guerreros Unidos es el único responsables de las desapariciones de los 43 estudiantes, cuyos restos habrían sido hallados en un vertedero de Cocula.
6 de diciembre de 2014. Un equipo de forenses argentinos confirma que uno de los restos óseos hallados en una fosa común pertenece al estudiante Alexander Mora Venancio.

2015

27 de enero de 2015. Murillo Karam afirma la “verdad histórica” en la cual el alcalde Abarca es el autor intelectual de las desapariciones forzadas y da por cerrada la investigación, tras concluir que todos los estudiantes fueron ejecutados e incinerados en el basurero de Cocula.
30 de enero de 2015. La Comisión Interamericana de Derechos Humanos presenta al Grupo Interdisciplinario de Expertos Independientes (GIEI), que realizará sus propias investigaciones en torno a Ayotzinapa.
27 de febrero de 2015. La senadora Arely Gómez sustituye a Murillo Karam en las investigaciones.

6 de septiembre de 2015. El equipo de investigación conformado por la Comisión Interamericana de los Derechos Humanos informa al gobierno mexicano de la de la existencia de un quinto autobús que tomó parte en los eventos, mismo que podría haber transportado estupefacientes opiáceos destinados a la Unión Americana, y que sin conocer esta circunstancia, lo habrían tomado los normalistas. Además, muestran un video de Tomás Zerón, titular de la Agencia de Investigación Criminal, en el basurero de Cocula tomado un día antes del supuesto hallazgo de los restos de los estudiantes. Salen a relucir diversas inconsistencias con la llamada “verdad histórica” promovida desde la Procuraduría de Karam
17 de septiembre de 2015. Detienen a Gildardo López Astudillo, alias ‘El Gil’, perteneciente al cártel de Guerreros Unidos y relacionado con la desaparición de los normalistas.
9 de febrero de 2016. Argentinos forenses presentan su dictamen sobre los restos hallados en el basurero de Cocula; queda descartada la “verdad histórica” de Karam.
27 de febrero de 2016. El GIEI da su labor por concluida y se retira del país, tras diversas fricciones con el gobierno mexicano.
30 de mayo de 2016. Absuelven al exalcalde Luis Abarca del asesinato de los estudiantes de Ayotzinapa, aunque permanece en prisión por cargos de narcotráfico y asociación delictuosa.
1 de marzo de 2017. La Comisión de Derechos Humanos de la Organización de las Naciones Unidas denuncia faltas al debido proceso en la investigación de la entonces Procuraduría General de la República (PGR).
26 de septiembre de 2018. Andrés Manuel López Obrador se reúne con los padres de los normalistas desaparecidos y les garantiza una investigación exhaustiva.
4 de diciembre de 2018. El presidente López Obrador crea la Comisión para la Verdad y el Acceso a la Justicia del Caso Ayotzinapa (COVAJ).
3 de septiembre de 2019. Gildardo Astudillo, ‘El Gil’, es absuelto de los crímenes de Ayotzinapa, y se convierte en testigo protegido del gobierno. Sería recapturado nuevamente en septiembre de 2024.
20 de febrero de 2020. El Gil proporciona declaraciones en torno a la desaparición de los estudiantes de Ayotzinapa, en la que proporciona información relevante sobre la Barranca de la Carnicería en Cocula, además de esclarecer los vínculos de los militares de Batallón 27 y Batallón 41 con Guerreros Unidos.
7 de julio de 2020 . Se localizan en la Barranca de la Carnicería los huesos de Christian Rodríguez Terlumbre.
26 de julio de 2020. Desde la presidencia se anuncian 70 órdenes de aprehensión contra elementos de Seguridad Pública y Ejército, además de solicitarse a Israel la extradición de Tomás Zerón, en su momento titular de la Agencia de Investigación Criminal (AIC).

2022

Miembros de la Covaj se entrevistan en Tel Aviv, Israel, con Tomás Zerón, para ofrecerle la oportunidad de declarar como testigo sobre el manejo inicial gubernamental del caso Ayotzinapa, pero él rechaza la invitación.

2024

26 de septiembre. A 10 años del acontecimiento y a menos de una semana del fin de su sexenio, el presidente Andrés Manuel López Obrador termina por reconocer que a pesar de que «hicieron todo por encontrar a los jóvenes y a nadie se le protegió», las cosas se les complicaron y los acontecimientos no llegaron a esclarecerse.

Imagen: Sur Acapulco