Al menos unos 50 muertos y 70 heridos, entre celadores e internos, además de algunas fugas es el balance que dejó el motín que tuvo lugar al interior de la cárcel de Topo Chico de Monterrey, México.
Equipos de la policía se desplazaron hasta el recinto para intentar tomar control de la situación.
Versiones extraoficiales indican que el motín fue iniciado por un grupo de internos que intentó proteger a presuntos líderes para que se fugaran.
Según la agencia RT, reseña que además se desató una gran nube de humo en las instalaciones, y según testigos hubo varias ráfagas con armas de fuego dentro del penal.