Miles marchan en «defensa» de la educación pública en Argentina

Buenos Aires. Miles de estudiantes, acompañados por docentes, rectores, decanos, personal no docente, sindicatos, organizaciones sociales y políticas se movilizaron este martes 23 de abril en esta ciudad y en los principales centros urbanos de Argentina en «defensa» de la educación pública y por un presupuesto acorde para el funcionamiento de las universidades.

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En Buenos Aires, la capital del país sudamericano, la manifestación comenzó en cercanías del Congreso de la Nación y luego se trasladó a la emblemática Plaza de Mayo, frente a la Casa de Gobierno, donde la presidenta de la Federación Universitaria Argentina (FUA), Piera Fernández De Piccoli, leyó un documento que firmaron todos los directivos de las universidades nacionales.

«La universidad pública argentina atraviesa un período crítico como consecuencia de la política implementada por el gobierno nacional. Convocamos a la ciudadanía para sostener las universidades públicas abiertas. Son uno de los motores de la democracia, la producción y los lazos sociales»

Piera Fernández De Piccoli
Presidenta de la Federación Universitaria Argentina

El documento remarcó que el sector llegó «a marzo de 2024 con un presupuesto de gastos a valores de septiembre de 2022. El incremento del 70 por ciento de estas partidas, dispuesto para el mes de marzo, más el reciente anuncio, en el marco de esta convocatoria, de un 70 por ciento adicional, constituyen un aliciente aún insuficiente en tanto la inflación fue de un 300 por ciento en el mismo período».

«Todos los problemas que tenemos se resuelven con más educación y universidad pública, con más inversión en ciencia y tecnología. Queremos que nuestras instituciones sean el dispositivo que le permitan a la Argentina desandar las desigualdades estructurales y emprender la senda del desarrollo y la soberanía. La educación nos salva y nos hace libres. Convocamos a la sociedad argentina a defenderla»

Las movilizaciones se realizaron bajo las consignas «cuidar la universidad» y «la educación no se negocia», y para denunciar la «emergencia presupuestaria»; contaron con la participación de alumnos, graduados y docentes de universidades tanto públicas como privadas. Muchos de ellos portaron un pañuelo azul con la leyenda «en defensa de la educación pública».

La marcha, con más de 500 mil personas en esta ciudad según estimaciones de los organizadores, incluyó a personas que llegaron en medios de transporte y caminando, entre ellos familias, graduados, grupos de amigos y alumnos.

Manifestantes en Argentina

Horacio De Rosa (73), ingeniero químico y docente universitario por más de 25 años en la Universidad de Buenos Aires (UBA), contó a Xinhua su «orgullo» por pertenecer a esa casa de estudios y explicó las razones de su presencia en el acto.

«Me movilicé porque creo que la universidad pública es muy importante y la educación que está dando es la mejor que hay en el país. Hay que defenderla para mantener nuestros valores»

Horacio De Rosa
Primera generación de graduados universitarios en su familia

Graciela Spagnuolo (25), de la carrera de Psicología en la UBA, dijo que su familia no tiene recursos para enviarla a una universidad privada, por lo que asistir a la universidad pública es clave para su formación: «La educación debe ser un derecho para todos, es lo que nos hace mejores como sociedad. Yo voy a ser la primera egresada universitaria en mi familia».

Por su parte, Emanuel Más (21), de la Escuela Municipal de Medios Audiovisuales (EMMA) de Lomas de Zamora, periferia sur de la capital, dijo que se sumó a la marcha para «defender la educación, la ciencia y la cultura».

Rechazó a la «politización» de la marcha

En ese marco, el gobierno del presidente liberal Javier Milei rechazó la «politización» de la marcha.

El vocero presidencial, Manuel Adorni, dijo en una conferencia de prensa que el gobierno «respeta los reclamos que puedan tener los estudiantes genuinamente», pero remarcó que la discusión presupuestaria «está saldada» con el depósito del 100 por ciento de los gastos de funcionamiento de las universidades nacionales que la Administración central concretó ayer lunes.

El funcionario consideró que «es legítimo cualquier reclamo que puedan hacer los jóvenes», pero advirtió que «las personalidades y organizaciones que convocaron la han transformado en una marcha política».

El gobierno argentino ha denunciado públicamente que las universidades públicas se han convertido en centros de «adoctrinamiento» y las acusa de falta de transparencia en el uso de fondos públicos.

«Siendo un presupuesto público y una erogación que hacemos todos los argentinos, es razonable y no debe molestar a nadie que existan auditorías para saber en qué se gasta el dinero»

Dentro de cada universidad, planteó Adorni.

La FUA dijo, en cambio, que la marcha no fue partidaria, sino que está avalada por buena parte de la sociedad civil, que rechaza la «desfinanciación» de las 57 universidades nacionales.

En la capital, la movilización estuvo protagonizada por la UBA, una de las más prestigiosas de América, y de la que egresaron los cinco Premios Nobel de Argentina, además de 16 expresidentes.

Durante la jornada sumaron su apoyo a la marcha la Confederación General del Trabajo (CGT), la Central de los Trabajadores Argentinos (CTA), agrupaciones de izquierda, el Partido Justicialista (PJ, peronismo) y la Unión Cívica Radical (UCR, socialdemócratas).

Prensa local buscó «poner en jaque al Gobierno»

La ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, señaló a la prensa local que la protesta buscó «poner en jaque al Gobierno», al contar con la presencia de dirigentes políticos de la oposición, y señaló que «el país entero está en un momento en que debe ajustarse para salir adelante».

Además de la marcha en Buenos Aires, hubo manifestaciones en ciudades como Mendoza (oeste), Córdoba (centro), Rosario (centro), Bahía Blanca (centro), Mar del Plata (centro), Salta (norte) y Neuquén (sur), entre otras.

El decano de la Facultad de Derecho de la UBA, Leandro Vergara, advirtió en diálogo con Xinhua que por la situación de emergencia, con el presupuesto actual esa unidad académica «apenas podrá cumplir con los servicios de limpieza sólo por unos meses más».

«Nuestros estudiantes compiten en los mejores lugares, junto con las mejores universidades del mundo y siempre tienen lugares muy destacados», resaltó Vergara, que pidió «cuidar a la Universidad de Buenos Aires».

Según un reporte de la UBA, esa casa de estudios enfrenta una reducción del 26 por ciento en términos nominales y del 80 por ciento en términos reales de su presupuesto para educación, salud, ciencia, técnica y hospitales universitarios.

El Ministerio de Capital Humano, en tanto, dijo el lunes por la noche en un comunicado que el Gobierno «defiende la educación pública, a la vez que reitera el derecho del pueblo argentino a conocer el destino y ejecución de toda partida» presupuestaria.

La cartera aseguró además que las universidades públicas recibieron la víspera 21 mil 888 millones de pesos (unos 25,09 millones de dólares) del Estado Nacional para su funcionamiento, con un aumento del 70 por ciento respecto del desembolso anterior.

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