El relator especial de la Organización de Naciones Unidas, Michel Forst instó al gobierno hondureño a tomar medidas urgentes para garantizar la protección de los defensores de los derechos humanos (DDHH)en esa nación centroamericana.
Precisó que el 97% de los crímenes cometidos contra defensores de los derechos humanos continúan sin resolverse, por la falta de rendición de cuentas por los asesinatos y otros delitos cometidos y los periodistas estimulan más esa violencia contra estas personas.
«Insto encarecidamente al Gobierno de Honduras a que adopte medidas para corregir los errores y adoptar medidas concretas para hacer frente a los desafíos que se plantean», expresó el relator.
A su vez, pidió que sean elaborados protocolos de investigación específicos para los delitos contra los defensores y defensoras de derechos humanos, así como iniciativas para reconocer públicamente el papel positivo que desempeñan y una mejor coordinación entre todas las instituciones del Estado.
Forst manifestó estar sorprendido por la cantidad de conflictos relacionados a la protección de los recursos naturales y los derechos sobre la tierra.
Comentó que en su viaje de diez días se reunió con muchas personas y comunidades dedicadas a la protección de sus tierras y que son contrarios a los proyectos de explotación de minería, construcción de las represas, la explotación forestal o el turismo.
«No cabe duda de que existe un patrón general de criminalización y hostigamiento judicial contra quienes denuncian el despojo de sus tierras y quienes defienden los intereses de estas comunidades”, aseguró.
Refirió que deben ser investigados los ataques contra los defensores de los derechos medioambientales y a que reconocer públicamente el rol que desempeñan como actores clave en la protección de los bienes comunes.
Detalló que desde hace diez años ha habido cerca de trescientos asesinatos de personas ligadas a ese colectivo, once de ellas defensores de los derechos humanos.
Calificó como preocupante los testimonios de los defensores de las garantías fundamentales de las personas Lesbianas, Gay, Transexuales, Intersexuales (LGBTI) quienes denunciaron la inactividad del Estado pretender reducir el uso de los medios de comunicación para incitar al odio contra estas personas.
Asimismo, señaló que los periodistas señalaron que han sido víctimas de acoso, intimidación y violencia por parte del ejército y la policía en la cobertura de protestas, especialmente durante la crisis postelectoral o las manifestaciones de estudiantes.
A su vez, manifestaron “haber sido objeto de campañas de descrédito y difamación, así como de amenazas de muerte”.
Durante su estancia en el país centroamericano, Forst visitó Tegucigalpa, La Paz, la Esperanza, Santa Bárbara, San Pedro Sula, La Ceiba, Tela, Tocoa y Choluteca, y se reunió con cerca de 400 defensores y defensoras de derechos humanos, el 40% de ellos eran mujeres.
El relator anunció que presentará su informe final al Consejo de Derechos Humanos en marzo del 2019.