Policías agreden a Observadoras de Derechos Humanos durante protestas por el #1DMx

Foto: Eduardo Blas

Durante las protestas de este primero de diciembre, al cumplirse 3 años de la toma de posesión de Enrique Peña Nieto como presidente, fueron agredidas y detenidas arbitrariamente en las inmediaciones del Monumento a la Revolución, dos integrantes de la Brigada Humanitaria de Paz Marabunta, organización defensora de Derechos Humanos.

A través de un comunicado, Artículo 19 advirtió que “es la quinta alerta que se emite desde el año pasado para exigir a las autoridades del Distrito Federal que se garantice la integridad física de los miembros de Marabunta y puedan realizar su labor humanitaria.”

Carla Ríos y Frida Cruz, fueron detenidas mientras observaban la detención de un grupo de jóvenes. “De repente vi que se llevaban a una de mis compañeras. Cuando eso estaba sucediendo, empiezo a documentar y les digo que es observadora de derechos humanos y entonces un policía de tránsito pasa frente a mí y me dice que lo golpee,” por lo que dos mujeres policías la detienen, comentó Carla Ríos para Articulo 19.

Fueron acusadas de ultrajes a la autoridad y golpeadas al subirlas a la patrulla. Minutos después fueron liberadas, al parecer, por órdenes del “Jefe Apolo”, Subsecretario de Operación Policial.

La Brigada Marabunta pertenece a la red #RompeElMiedo, creada por Articulo 19, que es una plataforma que tiene como objetivo velar por la seguridad y protección de periodistas, defensores de derechos humanos. Es por ello que “La red #RompeElMiedo hace un llamado al jefe de gobierno del Distrito Federal (GDF), Miguel Ángel Mancera, para que garantice el trabajo y la integridad de los miembros de la Brigada Humanitaria de Paz Marabunta. En dos años, han sido agredidos en más de cuatro ocasiones y objeto de agresiones físicas, amenazas verbales, detenciones ilegales, privación ilegal de la libertad y acoso”, subrayó Articulo 19.

Esta organización, recordó que la Ciudad de México dejó de ser un refugio para periodistas amenazados, agredíos u hostigados, pues ha habido un repunte en estas violaciones, donde el principal agresor es el funcionario público.

Por: Salvador Valencia

El Ciudadano