«Hace 99 años nació en Argentina una de las mujeres más influyentes y recordadas de la Patria Grande: María Eva Duarte de Perón, conocida por muchos como la ‘abanderada de los humildes’. Esta lideresa política se robó el corazón del Pueblo por su lucha en favor de los oprimidos», escribió este lunes 7 de mayo el presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, en su cuenta en Twitter conmemorando el natalicio de la líder revolucionaria.
Hija ilegítima de un pequeño terrateniente que falleció cuando era pequeña, María Eva Duarte fue criada por su madre, Juana Ibarguren, y sus hermanos. Nació el 7 de mayo de 1919, en la localidad bonaerense de Los Toldos y llegaría a Buenos Aires con 15 años de edad empeñada desde muy niña en desarrollar una carrera como actriz. Pero no sería hasta octubre de 1934, que se instalaría en la capital para dar curso a su sueño.
Con un modesto desempeño en teatro, paseándose por diversas compañías, y en radio, su más detacado logro ocurriría en 1944 al presidir la Agrupación Radial Argentina, año en el que también se alzaría con un papel importante en el filme: La Cabalgata del circo el cual, un año más tarde, le otorgaría el rol protagónico de La Pródiga.
Dando un giro radical a su historia, 1944 supondría su acercamiento a Juan Domingo Perón, encargado de la Secretaría de Trabajo y Previsión de Argentina, con quien alcanzaría el poder y más tarde la gloria, mudándose con él al mes de noviazgo y se casaría el 22 de octubre de 1945, cuatro meses antes de que el general ganara las elecciones, que lo llevarían a asumir la presidencia el 4 de junio de 1946. A su lado se alzaría como la heroína del peronismo.
Como primera dama se esforzó por atender a quienes más dificultades padecían, manteniendo siempre su conexión con la clase oprimida de la cual provenía, tomando en cuenta también a los trabajadores y a las mujeres.
La lucha y voz de los «descamisados«, la creación de los «hogares-escuela«, las Cajas de Jubilaciones, la escuela de enfermería y el voto de la mujer fueron algunos de sus aportes más significativos.
Admirada y querida, por un pueblo que la pedía al mando, Evita se alejó de la vida pública el 4 de junio de 1952, cuando acompañó a Perón en los actos de asunción de su segundo mandato. Gravemente enferma, falleció el 26 de julio de 1952 (a los 33 años de edad) tras luchar con un cáncer.