El gobierno de facto de Bolivia difundió un comunicado en el que informó que la autoproclamada jefa de Estado, Jeanine Añez, solicitó la renuncia a todos sus ministros.
Ante la candidatura de Áñez a las elecciones presidenciales del 3 de mayo, se decidió el 16 de enero en una reunión con el gabinete la renuncia colectiva, esto, con el objetivo de «perfeccionar» algunos aspectos de su gobierno y, dar la pelea en los comicios, “Ha decidido solicitar la renuncia de todos los ministros para encarar esta nueva etapa de la gestión de transición democrática”, citan medios locales.
Igualmente, en el documento la Secretaría de la Presidencia establece que Áñez se compromete a que su candidatura no afectará en nada su propósito de trabajar para todos los bolivianos buscando la paz y la estabilidad de Bolivia.
La ahora candidata presidencial promete que completará o ratificará a su equipo de gobierno en el menor tiempo posible para dar continuidad a los objetivos trazados en el inicio de su gestión.
En este sentido, a través de su cuenta en la red social Twitter, @JeanineAnez, comunicó a la población su deseo de seguir en el poder, aunque lo planificado desde un principio era que encabezara un Gobierno de transición, «Querida familia boliviana, he tomado la decisión de presentarme como candidata para las elecciones nacionales. Hemos logrado construir una gran alianza porque queremos continuar con el trabajo que hemos venido realizando. ¡Muchas gracias por todo el apoyo, podemos hacerlo JUNTOS!», escribió.
Pobladores y analistas bolivianos rechazaron la decisión de la autoproclamada Jeanine y se preguntan ¿le agarró el gusto al poder?. De sus filas también ha recibido criticas, fue el caso de la ministra de Comunicación.
La titular de la cartera de Comunicación, Roxana Lizárraga, informó su renuncia antes que se diera a conocer el comunicado, al afirmar que no estaba de acuerdo con la postulación de Jeanine a los comicios del mes de mayo, “No se puede ocultar el hecho de que su Gobierno ha comenzado a incurrir en los mismos males del masismo que combatimos”, sostuvo en parte de su carta de dimisión señala La Razón.
Áñez asumió la Presidencia el 12 de noviembre, dos días después de la renuncia forzada de Evo Morales, quien sufrió un golpe de Estado, en el que se vieron involucrados; la Organización de Naciones Unidas (OEA), un motín policial, alto mando militar, acciones violentas por el entonces cívico de Santa Cruz, Luis Fernado Camacho, entre otros factores que involucran a Estados Unidos.
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