Autoridades de la Unión Europea (UE) y de la República de Cuba estrecharon lazos de cooperación en materia de energías renovables y fijaron nuevas áreas de diálogo, en materia de no proliferación de armas de destrucción masiva, control de armas convencionales o aplicación de objetivos para el desarrollo sostenible.
En tal sentido, la alta representante de la UE para la política exterior, Federica Mogherini, y el canciller cubano, Bruno Rodríguez Parrilla, firmaron un programa por valor de 18 millones de euros para que Cuba alcance su meta de obtener el 24 % de su electricidad de fuentes de energía renovable.
Mogherini aseguró que a través de estos acuerdos se «brindará ahora nuevas oportunidades para más inversión, más intercambio comercial» y «permitirá apoyar mejor el proceso de reforma económica y social de Cuba y contribuir a su desarrollo sostenible», citan medios digitales.
Por su parte, el Canciller Rodríguez Parrilla resaltó el estado actual de las relaciones UE-Cuba, que evidencian la capacidad de construir espacios para el diálogo y la cooperación en beneficio mutuo y «el propósito de privilegiar los elementos que nos unen por encima de los que nos diferencian».
Consideró que «existen condiciones favorables para el incremento de las relaciones comerciales y de inversión» en Cuba y agradeció «la posición de la UE de rechazo a la política de bloqueo» de Estados Unidos, que ha endurecido con «el Gobierno del presidente (estadounidense) Donald Trump (…) especialmente en el sector financiero y ha incrementado la agresividad de su aplicación extraterritorial contra bancos y compañías europeas».
Denunció que «el bloqueo continúa representando el principal obstáculo para el desarrollo pleno de los vínculos económicos comerciales entre la UE y Cuba».
Adicionalmente, se conoció que la UE y Cuba preparan un proyecto de 21 millones de euros sobre seguridad alimentaria y agricultura sostenible, y avanzarán en los intercambios en el marco de la celebración del año europeo del Patrimonio Cultural.
Durante este encuentro, efectuado en Bruselas y que estuvo enmarcado en el Acuerdo de Diálogo Político y Cooperación (PDCA) firmado por ambas partes en diciembre de 2016, las autoridades diplomáticas también abordaron las relaciones entre la UE y los países de América Latina y el Caribe.
«Hoy nos reunimos para completar el cambio de página y lanzar nuestro trabajo conjunto para la implementación de este acuerdo (…) que puso fin a una anomalía: hasta ahora Cuba era uno de los pocos países del mundo sin vínculos contractuales con la UE, pese a ser el primer socio comercial de Cuba», declaró a la prensa Mogherini.