El gobierno de Uruguay hizo un llamado al diálogo en Venezuela tras el acto electoral del domingo que le dio seis años más en el poder a Nicolás Maduro, pero evitó pronunciarse sobre la validez de la convocatoria.
«La elección del pasado domingo confirma la necesidad de un diálogo nacional amplio, inclusivo y respetuoso entre todos los actores políticos y sociales de Venezuela como la única herramienta viable para lograr la paz social, el ejercicio efectivo de la democracia, el respeto a los derechos humanos, la plena vigencia del estado de Derecho y la superación de la crisis económica y social que los aflige», reza el comunicado de la cancillería del gobierno del izquierdista Tabaré Vázquez.
Uruguay es el último país latinoamericano en emitir un comunicado relacionado con el proceso del domingo en Venezuela, dos días después de realizada la votación que tuvo 54% de abstención, la mayor en la historia de la democracia venezolana.
Mientras la oposición política uruguaya y sectores moderados de izquierda le piden a Vázquez que se pronuncie claramente sobre la situación en Venezuela, el gobierno uruguayo –en medio de la presión de sectores partidarios del chavismo en el gobernante Frente Amplio, como el Partido Comunista- ha optado por no condenar al gobierno de Nicolás Maduro y llamar al diálogo.
Esa postura le costó a Uruguay un duro enfrentamiento con sus socios del Mercosur (Brasil, Argentina y Paraguay), con los que chocó desde 2016 sobre la suspensión de Venezuela del bloque comercial, extremo que terminó ocurriendo en agosto del año pasado.
«El gobierno de Uruguay ha seguido con la mayor atención el proceso electoral en Venezuela, en el contexto de la difícil situación política, económica y social que atraviesa este país y tal como ha expresado reiteradamente, reafirma que la peor solución para el pueblo de Venezuela es profundizar su aislamiento internacional», añade ahora el comunicado oficial uruguayo.
Uruguay se mantiene a contrapelo de la mayoría de las naciones latinoamericanas que, desde el Grupo de Lima (que también integra Canadá junto a 13 naciones del subcontinente), llamaron a consultas a sus embajadores en Caracas y acordaron bajar el nivel de relaciones y bloquear fondos internacionales a Venezuela, comentó una nota de Panorama.