El Ministro de Relaciones Exteriores de Venezuela, Jorge Arreaza exhortó al cuerpo diplomático acreditado en ese país, informar a sus gobiernos y cancillerías, así como organismos internacional la verdad de lo ocurrido ayer en la Avenida Bolívar donde fue frustrado el atentado magnicida contra el presidente de la República, Nicolás Maduro Moros.
«Deconstruyan la historia y traten de construirla, incluyan los elementos de la oposición de manera rigurosa y ordenada para que vean como la verdad se va a imponer. La verdad es que tenemos un presidente recientemente reelecto que exige al mundo respeto para poder cooperar en paz, con soberanía, libertad», acotó el ministro.
«¡Ya basta de intolerancia política para juzgar, ya basta de que el imperialismo actué! (…)!, expresó Arreaza durante el encuentro en el que asistieron representantes de todos los continentes del mundo entre ellos, América, Asia, Europa y Oceanía.
El canciller explicó que lo sucedido en el 81 aniversario de la Guardia Nacional Bolivariana «no es cuento, esto es serio y nosotros no tenemos una guerra y ustedes pudieron haber perdido la vida en ese intento de atentado«.
Arreaza resaltó que el magnicidio en grado de frustración se convierte en otra muestra más irrefutable de que la ultra derecha venezolana y el eje Caracas-Miami-Bogotá tienen responsabilidad en las acciones que se fraguan contra el país desde el extranjero y el atentado es un ejemplo de ello.
No habrá guerra en Venezuela
Desde la Casa Amarilla ubicada en Caracas, el ministro Arreaza dijo que «el presidente Maduro no descansará un minuto para evitar la confrontación entre el pueblo venezolano que es lo que han patrocinado«.
Agregó que están disponibles los expertos económicos del país surcaribeño para despejar las dudas en cuanto a las medidas tomadas por el Gobierno para la recuperación de la economía que rompe los patrones y anclajes de la moneda, para desengancharla del sistema y bloqueo de los Estados Unidos.
Arreaza recordó que todos los sucesos que han padecidos los venezolanos en 20 años de la revolución bolivariana, inclusive las guarimbas de 2017 y el atentado, «el objetivo era derrocar al presidente de Maduro y generar una guerra en la nación.»
Alertó que a medida de que la economía venezolana se vaya recuperando, «más peligrosos se pondrán los enemigos en lo interno, desde Colombia y Estados Unidos».