Las compañías petroleras norteamericanas pierden más que cualquier otra empresa del mundo e incluso que el propio país suramericano, con las sanciones impuestas a la empresa estadal petrolera venezolana Petróleos de Venezuela S.A. (PDVSA), durante el gobierno del presidente norteamericano Donald Trump.
Así lo aseveró la cancillería rusa al rechazar las sanciones impuestas por el gobierno norteamericano a la empresa petrolea Rosneft, por comprar petróleo al país caribeño, desestimados de esta manera las medidas estadounidenses.
Las empresas petroleras estadounidenses que han dejado de trabajar con Venezuela “han sufrido pérdidas colosales después de que Washington les obligara a cesar la cooperación», aseveró la cancillería del país euroasiático.
También puso en duda la eficacia de las sanciones unilaterales estadounidenses contra Rosneft, en virtud de que la compañía rusa y la petrolera venezolana siguen trabajando exitosamente.
En ese sentido la Cancillería rusa instó a Washington a cambiar su política de sanciones y sumarse, más bien, a las labores conjuntas para solucionar la crisis en Venezuela, destacó el portal Sputnik Mundo.
«Llamamos a Estados Unidos a reflexionar y en lugar de imponer prohibiciones a las compañías y bancos extranjeros, unirse al trabajo conjunto, bajo el auspicio de la ONU, para contribuir a la estabilización en Venezuela», puntualizó el ministerio.
El pasado 11 de marzo el secretario de Estado de EE. UU., Mike Pompeo, criticó que la empresa rusa Rosneft siga adquiriendo crudo de PDVSA, pese a las sanciones adoptadas por Washington.
El ministro de Asuntos Exteriores de Rusia, Serguéi Lavrov, por su parte, criticó las declaraciones de Pompeo y sentenció que las imposiciones económicas por parte de la administración de Donald Trump violan las normas éticas y vulneran el derecho internacional, publicó el portal web de la televisora interestatal Telesur.
«Vemos una violación grave de las normas éticas y jurídicas cuando Washington exige a los países a no comprar materias primas e hidrocarburos» a otros países, dijo Lavrov.
«Hace poco Pompeo acusó a Rosneft de evadir las sanciones estadounidenses y le exigió que deje de comprar petróleo a la compañía venezolana, esto no se ajusta, de ninguna manera, al derecho internacional», añadió.
El pasado 28 de enero, el Departamento del Tesoro de EE. UU. impuso sanciones a PDVSA, que implican el congelamiento de 7.000 millones de dólares y el bloqueo de todos los pagos que hagan empresas estadounidenses que compren petróleo venezolano.
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