Composiciones de Teresa Carreño la convirtieron en una de las más grandes pianistas de Venezuela y el mundo

Hace 101 años, el 12 de junio de 1917 falleció en Nueva York, Estados Unidos, María Teresa Gertrudis de Jesús Carreño García, concertista y compositora venezolana de fama mundial, considerada como la más grande pianista de su época.

En este sentido, el presidente de la República Bolivariana de Venezuela, Nicolás Maduro, se pronunció mediante un mensaje publicado en su cuenta oficial en la red social Twitter, para recordar a esta importante pianista.

«Hoy se cumplen 101 años de la siembra de una de las más grandes pianistas de Venezuela y el mundo, nuestra caraqueña María Teresa Carreño», escribió el primer Mandatario Nacional.

Asimismo, el jefe de Estado calificó a Carreño como una destacada cantante de ópera y directora de orquesta, y recordó que entre sus composiciones resalta el Himno al Libertador Simón Bolívar.

Hoy se cumplen 101 años de la siembra de una de las más grandes pianistas de venezuela y el mundo, nuestra caraqueña María Teresa Carreño. Destacada cantante de ópera y directora de orquesta; entre sus composiciones resalta el Himno al Libertador Simón Bolívar. pic.twitter.com/gVqYGYlQ4x

— Nicolás Maduro (@NicolasMaduro) June 12, 2018

Biografía

Nació en Caracas el 22 de junio de 1853. Hija de Manuel Antonio Carreño y de Clorinda García de Sena y Toro.

Inició sus estudios de piano con su padre y los continuó con Julio Hohené. Con apenas 9 años de edad, dio su primer concierto en el teatro Irving Hall de Nueva York y recibió lecciones del famoso pianista norteamericano de origen alemán Louis Moreau Gottschalk.

Luego de pasar una temporada en La Habana (Cuba) y Estados Unidos donde tocó en la Casa Blanca para el presidente Abraham Lincoln, se radicó en París (1866).

Inició su carrera de concertista que la llevó a visitar todos los países de Europa, Estados Unidos, Australia, Nueva Zelanda y África del Sur, ejecutando importantes piezas clásicas y románticas, acompañada de las más importantes orquestas dirigidas por eminentes maestros.

En 1873 se casó con el violinista Emile Sauret, pero se divorció en 1875 para casarse al año siguiente, con el cantante de ópera Giovanni Tagliapetra.

A mediados de 1885, volvió a Venezuela luego de una ausencia de 25 años, sin embargo, la sociedad caraqueña empezó a adoptar una actitud de rechazo por ser una mujer divorciada y vuelta a casar, lo que era para el momento un escándalo.

De regreso a Europa, ya divorciada de su segundo marido, conoce al pianista Eugêne D’Albert con quien se casó se casó el 27 de julio de 1892, divorciándose luego por tercera vez en 1895. Finalmente, en 1901, se casaría por cuarta y última vez con su cuñado, Arturo Tagliapetra.

Al estallar la Primera Guerra Mundial, inició una gira por España, Cuba y Estados Unidos donde falleció, víctima de un agotamiento general debido a los largos años de excesivo trabajo.

Sus cenizas fueron traídas a Venezuela en 1938 y desde el 9 de diciembre de 1977 reposan en el Panteón Nacional. En su honor, el principal complejo cultural de Caracas, inaugurado en 1983, lleva su nombre.