Si Estados Unidos, Canada y la Unión Europea levantan sus sanciones contra Venezuela, no hay nada que agradecer, porque «esas medidas jamás debieron existir«, dijo a Sputnik el coordinador general de la Central Bolivariana de Trabajadores del país sudamericano, Carlos López.
«Si suspenden las medidas desde luego vamos a tener mejores condiciones, pero no es que estemos agradecidos, porque ellos nunca han debido aplicar esas medidas contra nosotros; esas son acciones de guerra, y cuando alguien deja de agredir a otro país, no es que se le de las gracias«, señaló en declaraciones ofrecidas a Sputnik.
Las sanciones o medidas coercitivas unilaterales contra Venezuela aumentaron a partir de 2013, y son calificadas por los funcionarios de su Gobierno como crímenes de lesa humanidad. Tras la muerte del mandadatario Hugo Chávez (1954-2013), cuando asumió como presidente Nicolás Maduro al cerco económico se le sumó una caída de los precios del petróleo y escándalos de corrupción en ese sector, por lo que los ingresos del país cayeron de forma radical.
En 2017 la crisis política en Venezuela se agudizó con protestas en las calles, momento en que la UE, Canadá y Estados Unidos comenzaron a adoptar sanciones contra funcionarios del Gobierno y contra las principales industrias del país caribeño.
«Esto se aceleró hace ocho años; esos ocho años de medidas coercitivas unilaterales han llevado a Venezuela a una crisis, a rebuscar sus capacidades para desarrollarse, con apoyo de países que no están con ánimos de intervenir, sino de colaborar. Hemos tenido que buscar nuevas formas de exportar nuestras riquezas y así vamos construyendo una base económica», explicó López.
Sin embargo, dichos países han dicho que saludan los avances en Venezuela y que están dispuestos a revisar la política de sanciones.
En este punto, López considera que las palabras de estos países no son otra cosa que «una demostración de arrogancia», pues considera que las sanciones no deben ser levantadas a cambio de nada, sino que deben ser eliminadas unilateralmente porque constituyen una violación a las leyes y tratados internacionales.
Además, destacó que las sanciones han ocasionado «una situación terrible de pérdida del salario», como consecuencia de la hiperinflación, que cerró por encima de 2.000 % en 2017, y que solo ha descendido levemente desde entonces.
Finalmente, el sindicalista explicó que si las sanciones se levantan el cambio económico en Venezuela no será inmediato, pero avanzará en su recuperación de forma más acelerada.
El pasado 9 de febrero, López presentó una serie de propuestas a la Comisión Especial para el Diálogo, Paz y Reconciliación de la Asamblea Nacional para ser tomadas en consideración, entre ellas, la conformación de una mesa de diálogo para plantear una articulación permanente de la clase obrera, una mesa de discusión con Fedecámaras y empresarios para discutir sobre los salarios, así como avanzar en las investigaciones de quienes, desde la anterior AN, impulsaron acciones contra el país.
Fuentes: Sputnik/VTV.
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