Las venezolanas y los venezolanos ejercen este domingo 28 de julio su derecho al voto para elegir al Presidente de la República en unas elecciones cruciales para la nación sudamericana que transita un camino de recuperación económica en medio de las sanciones y el bloqueo impuesto por Estados Unidos y sus aliados.
El cronograma del Consejo Nacional Electoral (CNE) de cara a estos comicios, que hoy atraen la atención del mundo, se ha cumplido a cabalidad, con todas las auditorías y las fases que se establecieron para tal fin y con la presencia de representantes de todas las organizaciones políticas que participan.
Uno de los pasos transversales en este camino, dados los antecedentes de los sectores de la derecha, fue la firma del Acuerdo de Reconocimiento de Resultados de la Elección Presidencial 2024 el pasado jueves 20 de junio en la sede del Poder Electoral en Caracas.
Sin embargo, solo ocho de los diez candidatos firmaron el pacto:
- Luis Eduardo Martínez
- Daniel Ceballos Morales
- Antonio Ecarri Angola
- Benjamín Rausseo
- José Brito González
- Claudio Fermín
- Javier Bertucci Carrero
- Nicolás Maduro Moros
Entre los dos que no lo hicieron está Edmundo González, de la denominada Plataforma Unitaria y a quien escolta María Corina Machado. Tampoco lo firmó Enrique Márquez Pérez.
¿Qué contempla el acuerdo?
«PRIMERO: Actuar en estricto cumplimiento de la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela, la Ley Orgánica del Poder Electoral, la Ley Orgánica de Procesos Electorales y demás normas que rigen este proceso electoral.
SEGUNDO: Reconocer al Poder Electoral como la única autoridad legítima y competente para la organización, administración, dirección y vigilancia de la elección presidencial del próximo 28 de julio de 2024.
TERCERO: Reconocer que el Consejo Nacional Electoral ha venido dando cumplimiento a las garantías electorales en cada una de las fases del proceso establecidos en el cronograma electoral. Asimismo, convalidar los resultados emitidos por el Poder Electoral, respetando la expresión perfecta de la
voluntad popular manifestada a través del sufragio, en consonancia con lo previsto en los acuerdos de Barbados y Caracas.
CUARTO: Competir en un clima de respeto, paz y participación democrática, para que durante el proceso electoral del 28 de julio de 2024 y los días posteriores a éste, no se interfiera o desconozca la voluntad del pueblo de Venezuela con hechos de violencia y desestabilización que atenten contra el bienestar del país.
QUINTO: Solicitar a los Gobiernos del mundo el respeto a la soberanía y autodeterminación de nuestra Nación.
SEXTO: Cumplir con el deber de honrar y defender la Patria y exigir el levantamiento absoluto de las sanciones coercitivas unilaterales impuestas al noble pueblo de Venezuela.
SÉPTIMO: Los objetivos del presente acuerdo son la afirmación de la soberanía nacional, la estabilidad democrática, la gobernabilidad, el pleno respeto a los derechos humanos, las garantías en los procesos electorales, la cooperación ante las coyunturas económico-sociales existentes, el estado de derecho constitucional, el desarrollo pleno de los derechos políticos y la democracia, fomentar una política de reconciliación como fundamento para la convivencia democrática nacional y el repudio absoluto a la violencia como instrumento político.
OCTAVO: Rechazar y denunciar cualquier financiamiento o recurso provenientes de hechos ilícitos nacionales e internacionales.
NOVENO: Nosotros los candidatos reiteramos ante todas las venezolanas, los venezolanos, las Rectoras y los Rectores del Consejo Nacional Electoral, nuestra responsabilidad con la democracia, la plena sujeción al orden constitucional legalmente establecido en la República Bolivariana de Venezuela y la voluntad absoluta de reconocer los resultados emitidos por el Poder Electoral, como garante de la fuente creadora de los poderes públicos mediante el sufragio, fundamentando sus actos en la preservación de la voluntad del pueblo, expresada a través del voto en ejercicio de su soberanía».
Seguir leyendo: