Tania Díaz es una periodista y política venezolana de análisis agudo y espíritu combatiente, parlamentaria de la Asamblea Nacional (AN) de Venezuela por el Psuv, partido socialista del país suramericano. Fue primera vicepresidenta de la Asamblea Nacional Constituyente (ANC), la que se eligió en el 2018, tras los actos que llenaron de violencia a las ciudades venezolanas conocidos como “guarimbas”. También fue ministra para la Comunicación e Información en el 2010, durante el gobierno de Hugo Chávez (1998-2013).
Tiene una amplia experiencia en medios de comunicación social de su país, especialmente audiovisuales, también en medios impresos. Trabajó como periodista en el diario Correo del Orinoco, fue redactora en jefe en la antigua agencia de noticias del Estado venezolano, Venpres. Conductora de espacios de opinión en Radio Nacional de Venezuela (RNV), Venezolana de Televisión (VTV) y la televisora de la Asamblea Nacional, ANTV. Tania Díaz es una mujer apasionada de la comunicación y de la política.
-¿Cuál es su expectativa sobre el nuevo diálogo planteado en Venezuela entre el Gobierno de Nicolás Maduro y la oposición más extremista liderada por Juan Guaidó? ¿Usted le ve futuro a ese diálogo?
-Hay que decirlo como es, la Revolución, por enésima vez, ha logrado traer a tierra a la oposición, hemos logrado llevarla al camino del diálogo y de la Constitución, a la vida democrática y electoral, luego de intentar imponer la violencia. Este nuevo proceso de diálogo planteado también se ha logrado gracias al esfuerzo del Gobierno nacional y de todas las fuerzas de la Revolución, organizada, popular y que actúa políticamente de manera coherente. Estos actores políticos de oposición, que han promovido la agenda de agresión nacional, en el ámbito interno e internacional, siempre han sido los mismos, solo que hoy están representados en Juan Guaidó. Una vez más hemos logrado que fracasara estrepitosamente su de violencia. En este momento Washington no sabe ahora qué hacer con Guaidó, es como ese jarrón viejo de la casa que no sabes dónde ponerlo porque ya se puso viejo y lo pones en todos lados hasta que se rompe. Así está ahorita y no le queda otro remedio a la oposición que sumarse al diálogo porque ha sido tan visible la agresión en la que se montó con el bloqueo y las sanciones, que no le ha quedado otra posibilidad, están muy debilitados en lo interno y no tienen otro remedio que recomponerse por la vía de la política. El diálogo pasa por diversos sectores del país, no solamente la oposición política. En esa dirección también apuntamos.
-El gobierno de Iván Duque había decidido abrir, unilateralmente, la frontera con Venezuela. El Gobierno de Nicolás Maduro lo rechazó. Daba la impresión que el Gobierno de Duque intentaba generar una nueva crisis en la frontera con Venezuela ¿Cuál es su consideración sobre el tema fronterizo?
-El Gobierno de Iván Duque intenta desviar la atención internacional del tremendo problema social, político y de salud que tiene a lo interno. La última vez que revisé las cifras de contagios del Covid-19 en Colombia, iban por los 14.000 casos diarios y las víctimas mortales se contaban por centenares, por hablar solo de un aspecto del problema interno en ese país. Pocos hablan de eso, de lo que ocurre en Colombia, ni de la reforma tributaria que intentaba imponerse, meterle al pueblo más impuesto en medio de la crisis social por el modelo neoliberal que imponen y de salud por el Covid-19. El pueblo de Colombia tiene dos meses en la calle, no quiere más paramilitarismo y neoliberalismo; la juventud colombiana quiere una educación libre, gratuita, de calidad y universal, como la tenemos aquí en Venezuela, donde viven más de cinco millones de colombianos, eso tampoco se dice con frecuencia. Lo del Gobierno de Duque es una estrategia de guerra, un discurso perverso, diabólico y engañoso. La agresión contra Venezuela la dirige Iván Duque desde Colombia porque Venezuela es la “joya de la corona” para los Estados Unidos, Venezuela es la que tiene los 300 mil barriles de petróleo en la Faja del Orinoco, es una de las principales reservas de oro y de gas en el mundo; además tiene hierro, coltán, aluminio, agua y tierras cultivadas, somos la verdadera “joya de la corona” y nosotros lo sabemos.
-La vacunación masiva contra el Covid-19 en Venezuela, aparte de una necesidad, ha sido utilizado como una especie de campaña de proselitismo por sectores de oposición contra el Gobierno ¿Cuál cree usted que es la efectividad de ese campaña?
-De verdad que no entiendo por qué la oposición ha tomado la vacunación masiva como bandera para atacar a la Revolución. La oposición política extrema liderada por Juan Guaidó, que no cree en elecciones y tampoco respeta la Constitución ni las instituciones, ha ido a tocar la puerta de bancos y de calificadoras de riesgo, se ha entrevistado con los líderes políticos de los Estados Unidos y de otros países, para promover el bloqueo y las sanciones contra Venezuela, hecho que ha impedido, en buena en parte, ir más rápido con el tema de la vacunación masiva. Esa oposición ha promovido que los recursos de la nación sean robados por otros países, ha promovido el robo de empresas tan grades e importantes de Venezuela, como es el caso de Citgo en EE.UU. con más de 5.000 estaciones de servicios y tres refinerías, y Monómeros en Colombia, principal fabricante de lubricantes. Esas empresas venezolanas han sido robadas por los sectores de la oposición que encabeza Guaidó. Ellos no pueden hablar de vacunación masiva porque han sido ellos precisamente los que han promovido la retención de recursos que necesita Venezuela para comprar las vacunas. Las declaraciones de la oposición extrema solo sirven, en este momento, para los titulares de prensa, nacionales e internacionales, alineados en sus intereses contra Venezuela. El pueblo sabe que si no ha sido más rápido el proceso de compra de vacunas es porque precisamente nos tienen represados los recursos con apoyo de la oposición extremista. No obstante, el Gobierno y el país han logrado avanzar en el combate a la pandemia. No solamente hemos comenzado la vacunación masiva, Venezuela es uno de los países de América Latina con mejores registros de atención y recuperación de casos de Covid-19, solamente superados por Cuba y Nicaragua, a pesar de tener a Colombia y Brasil, como dos de los países con peores registros con la enfermedad. La mayoría de naciones han tenido más problemas y víctimas fatales que Venezuela porque en nuestra nación se instrumentó toda una política de Estado para contener el contagio y luego para atender a los contagiados. En este combate hemos participado todos, y los resultados están a la vista. Aquí no se queda ningún venezolano sin atención por el Covid-19, a pesar del bloqueo.
-El 21 de noviembre habrá megaelecciones regionales en Venezuela: De gobernadores, alcaldes y legisladores estadales y locales ¿En qué medida cree usted que la crisis económica incidirá negativamente en los resultados electorales para las organizaciones que respaldan al Gobierno nacional?
-Hay que decir que Venezuela ha perdido más del 90 por ciento de sus ingresos, como consecuencia del bloqueo y las sanciones contra su principal industria, la petrolera. El pueblo sabe que avanzar en esas condiciones es mucho más difícil y complejo en cualquier política económica. Cada vez que el país hace una transacción bancaria para adquirir, en el ámbito internacional, un repuesto para la industria, el sector agrícola o de cualquier otra área, debe dar con el proveedor que le puede vender, que no le tenga miedo a las sanciones de los gringos y luego cuando vas a pagar debes buscar un banco que lo pueda hacer y que tampoco le tenga miedo a las sanciones, luchar contra eso es mucho más difícil para avanzar. Creo que la oposición que va salir a buscar votos para el 21 de noviembre tiene que sincerarse y tener una postura más firme sobre ese tema, las sanciones y el bloqueo promovido por el sector más extremista de derecha de la oposición afecta a todo el país y a toda su población, independientemente de su postura y posición política.
Tanía Díaz también es vicepresidenta de Agitación, Propaganda y Comunicación del Partido Socialista Unido de Venezuela (Psuv). Desde esa organización política se promueve el Concurso Nacional de Murales, convocado en esa nación a propósito de la conmemoración de Bicentenario de la Batalla de Carabobo, una de las contiendas heróicas que selló la independencia de Venezuela en 1821, y que este 24 de junio se celebran sus 200 años de aniversario.
-¿Cómo ha sido la participación del pueblo venezolano en el Concurso Nacional de Murales? Esto a propósito del Bicentenario de Carabobo que se celebra este mes de junio ¿Se está logrando el objetivo de convertir o avanzar en la consolidación de pueblos, ciudades y comunidades venezolanas en museos a cielo abierto?
-De verdad estamos impresionados por la respuesta masiva del pueblo venezolano con este concurso, incluso de las regiones más alejadas de, como es el caso de Delta Amacuro, uno de los estados fronterizos más alejados del Oriente del país, con mucha vía fluvial. De allí hemos recibido expresiones muralísticas que están en concurso. Los ganadores, de los 24 estados, tendrán la posibilidad de ejecutar su obra en un formato gigante, en la ciudad de Caracas. Con este concurso buscamos hacerle frente a la agresión, de toda índole, que hemos recibido de manera brutal en los últimos años, desde el punto de vista simbólico y psicológico, que pasa por querer dividir a la población en bandos; por sembrar sentimientos de odio y por instalar una cultura de la guerra y el paramilitarismo, que se difunde principalmente a través de las redes sociales. También hemos visto esa xenofobia sembrada contra los venezolanos y Venezuela como un país sin expectativa, lo cual es falso. Con este concurso de murales le hemos dado al pueblo, entre otras razones, la oportunidad de expresar lo contrario, de que realmente somos un pueblo libre y soberano.