El Gobierno de Venezuela propuso la semana pasada declarar la vacuna contra el covid-19 como un «bien público universal». La razón, democratizar al máximo el acceso de las personas al antígeno que actualmente es acaparado por las grandes potencias económicas.
Al respecto el canciller de Venezuela, Jorge Arreaza, fue quien propuso el pasado viernes, al Consejo Económico y Social de las Naciones Unidas (Ecosoc), que la vacuna contra el covid-19 sea declarada como un «bien público universal».
«La vacuna debe ser un bien público universal, bajo procesos de producción y distribución asequibles, equitativos y transparentes», dijo el representante del gobierno venezolano durante la Reunión Especial del Ecosoc, «Una vacuna para todos», realizada por videoconferencia.
Arreaza consideró que permitir «que las vacunas sean una mercancía, es antihumano» y «criminal», por lo que alentó a los Estados miembros de la ONU a dar una respuesta coordinada para que los fármacos anticovid sean «la punta de lanza en el esfuerzo global por vencer la pandemia».
En ese sentido, manifestó la preocupación de Venezuela por «el grotesco desequilibrio existente en la distribución de vacunas a nivel mundial», que se da a pesar de la crisis sanitaria global, y apoyó la creación del Fondo de Acceso Global para Vacunas (Covax), porque hace más equitativo el proceso de inmunización.
Arreaza recalcó que Venezuela está comprometida en la lucha contra la pandemia, «contribuyendo con la Naciones Unidas y sus Estados miembros» para «incentivar la cooperación» y avanzar hacia la fabricación y distribución masiva de fármacos, para que «un bien público como las vacunas» pueda llegar a cada persona.
Venezuela denuncia la «negligencia del gobierno de Brasil»
El diplomático también aprovechó el foro para denunciar «la negligencia del gobierno de Brasil» en el combate a la pandemia, una situación que ha provocado consecuencias en Venezuela como el repunte de casos de pacientes con coronavirus infectados por las variantes brasileñas P1 y P2, consideradas como más virulentas y mortales.
Para Arreaza, la «irresponsabilidad de algunos Estados» en el abordaje de las medidas sanitarias para contener el covid-19, «ha puesto en riesgo los esfuerzos globales para la mitigación y la inmunización contra este peligroso virus».
El representante también reiteró que la imposición de «ilegales medidas coercitivas unilaterales», por parte de EE.UU., socava los esfuerzos venezolanos para enfrentar la pandemia y «obstaculiza el acceso» a medicamentos, insumos y vacunas necesarias.
«Si nuestros recursos no estuviesen bloqueados en la banca internacional, gracias a las sanciones de EE.UU., ya contaríamos con todas las vacunas e insumos necesarios», denunció Arreaza, quien destacó que a pesar de la situación, han podido coordinar el pago de más del 50% del mecanismo Covax.
En su intervención, Arreaza dio gracias a los gobiernos de Cuba, Rusia y China por la solidaridad y cooperación que han mantenido con Venezuela, ya que han sido claves para garantizar el suministro de vacunas e insumos médicos. Asimismo, reconoció los esfuerzos de la ONU y el liderazgo de la OMS para atender la emergencia y apoyar a los países en desarrollo.
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