Provocar una mayor división en la sociedad venezolana es el objetivo de Estados Unidos, ante esta situación la cancillería rusa a través de un comunicado ha difundido que se debe «promover la búsqueda de un consenso interno» en el país sudamericano.
La sede diplomática rusa ha indicado que cuestionar la legitimidad de Nicolás Maduro en las elecciones presidenciales del pasado 20 de mayo de 2018 era el objetivo que perseguían factores externos e internos.
La situación vivida en el país petrolero fue catalogada por Rusia como «una presión externa sin precedentes. Evitar que una amplia gama de fuerzas políticas, incluidas las de la oposición, participaran en la votación, para así poder cuestionar la legitimidad de la expresión de voluntad» del pueblo, resalta el comunicado, difunde RT.
El diálogo es la opción que pone sobre la mesa Rusia y aplaude la posición de países del mundo de rechazar una posible intervención contra Venezuela. Igualmente repudió a quienes optan por la desestabilización «Buscan crear un ambiente de «caos» e incluso «lanzan ideas sobre la posibilidad de una intervención externa».
La cancillería también consideró como «una señal positiva» que varios Estados europeos empiecen a entender la importancia de «encontrar nuevas fórmulas de mediación» para facilitar el retorno de las autoridades venezolanas y la oposición a la mesa de negociaciones.
«Confirmamos nuestra disposición a cooperar estrechamente con la amistosa Venezuela, su pueblo y las autoridades legítimas», indica el documento.
Moscú ha mostrado su compromiso de seguir «ayudando a la nación suramericana a encontrar una salida a la complicada situación económica», concluye el ministerio ruso.
El 10 de enero, día en el que Nicolás Maduro se juramentó como presidente de Venezuela, el Gobierno estadounidense reafirmó su negativa a reconocerlo en el cargo, por considerar ilegítima su elección. El consejero de Seguridad Nacional de Donald Trump, John Bolton, sostuvo que Washington continuará «aumentando la presión sobre el régimen corrupto» y apoyará a «la Asamblea Nacional democrática» reseña RT.
Presidente, Nicolás Maduro y Wladímir Putin
El Grupo de Lima integrado por 14 países ha sido un aliado para EE. UU. El bloque desarrolla una injerencia contra la Revolución Bolivariana, aplaudida y dirigida por el país norteamericano. El objetivo; la caída de Nicolás Maduro.
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