Tres muertos y decenas de heridos dejan los incendios forestales al norte de California, que ya suman 17. Por el momento, las llamas siguen sin ser controladas debido a las altas temperaturas, la sequedad del terreno y el viento.
Unos 500 bomberos siguen luchando contra el fuego afectando a más 12 mil personas, que han tenido que ser desalojadas.
Incendios provocados
Esta semana, se han registrado 60 incendios. Las autoridades informaron sobre la detención de un sujeto de 32 años, por sospechas de estar detrás de los siniestros.
Breandon McGlover, de 32 años, es investigado por ser el presunto responsable de los incendios que azotan la zona, según informó hoy la Fiscalía del Condado de Riverside. El investigado, a quién se le fijó una fianza de 1 millón de dólares, se enfrenta hasta 15 cargos criminales y de ser hallado culpable, enfrenta una sentencia máxima de cadena perpetua.
Lucha contra el fuego
El llamado incendio Ferguson ha consumido cerca de 18.615 hectáreas, mientras que, en el norte del estado, el incendio Carr sobrepasó las 17.806 hectáreas y además se cobró la vida de un bombero y la de un operador de maquinaria pesada. Además de destruir 120 estructuras.
Otro incendio importante, el llamado Cranston, en la localidad sureña de Idyllwild, en las Montañas de San Bernardino, ha consumido casi 4.700 hectáreas y no tiene visos de menguar, lo que ha vuelto a las localidades afectadas en escenarios de caos.
Estado de emergencia
El fuego que comenzó el 13 de julio en el Bosque Sierra Nacional al este de California, el llamado Ferguson y que obligó al cierre de al menos tres sectores en el Parque Nacional Yosemite, está contenido en un 29 %, según el reporte más reciente del Departamento Forestal y de Protección contra Incendios de California (CAL FIRE).
En el combate de las llamas de este incendio, que ha dejado siete heridos, participan más de 3.800 operarios que utilizan 261 camiones de bomberos, 16 helicópteros y 79 bulldozer, entre otras máquinas.
El Servicio Nacional del Clima ha previsto para hoy en el área afectada por este incendio, donde miles han sido evacuados, fuertes vientos, de hasta 25 millas por hora (40 km/h), y se espera que las temperaturas en ciudades como la de Redding alcancen los 111° fahrenheit (43,9 centígrados).
Ante la amenaza latente de estos tres grandes fuegos, el gobernador de California, Jerry Brown, declaró el estado de emergencia para los condados de Riverside y Shasta, al igual que para el condado de Mariposa.