Segunda reunión que realizan representantes del Comité Bulnes Sin Termoeléctricas con la Seremi de Energía, Carola Venegas, en el marco de la concientización y sensibilización de las autoridades que votan el proyecto, acerca del daño que causaría la mayor termoeléctrica a gas en el corazón agrícola de Bulnes. Esta vez con antecedentes más concretos (la vez anterior se habían reunido cuando aún no se presentaba el Estudio de Impacto Ambiental de la Central El Campesino), pudieron dar a informar del cambio radical que significaría para los agricultores y campesinos de la zona la instalación del megaproyecto energético.
En primera instancia, se criticó el proceso de Participación Ciudadana que contó con cinco sesiones en Bulnes. “Más que acercarse a la gente, se alejaron porque se rieron de nosotros en las mismas reuniones, nunca nos dieron las mismas respuestas, en las cinco reuniones que se realizaron nos dijeron cosas distintas. Entonces, más miedo nos da de gente que no es responsable del proyecto” argumenta el presidente del comité, Victor Díaz, señalando que la empresa inversionista no es Biobíogenera sino que Electricité de France (EDF), que es el socio mayoritario que se quedaría con el proyecto.
Ximena Jara, campesina de Santa Clara, destacó la importancia mundial que tiene y tendrá aún más a futuro la agricultura diciendo que lo que se defiende “no es sólo cómo uno vive sino que es es una preservación del futuro, porque a nosotros nos quedarán algunos años más pero el mundo sigue y uno no puede vivir del ahora. Uno está trabajando para el futuro: así como nuestros padres nos heredaron la agricultura así nosotros vamos a dejar esta tradición”. También hizo entrega de un documental acerca del negocio de la tierra para que profundizara aún más su importancia.
Rosa Fernández es temporera de Las Mariposas, y declara que su trabajo le ha permitido surgir a ella y a su familia, pudiendo entregarle la educación a su hijo, por lo que “quería pedirle a usted como mujer y yo como madre que cuanto usted vote piense en nosotras” refiriéndose a las cientas de temporeras que día a día subsisten de la agricultura.
Por su parte, Gerardo Guiñez, destacó que la presidenta ha señalado en reiteradas veces que Chile se transforme en potencia agroalimentaria. “Esa contraposición entre seamos potencia agroalimentaria pero también necesitamos energía para el cobre ¿Vamos a destruir una por otra considerando el cobre tiene su vida útil contada?” declaró Guiñez, señalando que los estudios proyectan que el cobre se acabaría en 50 años más, por lo que representantes recalcaron que el futuro de Chile es la agricultura.
La seremi agradeció la disposición al diálogo comprometiéndose a interiorizarse acerca de las más de mil observaciones que ha entregado al proyecto la ciudadanía, y una vez que esté listo el Informe Consolidado de Solicitud de Aclaraciones, Rectificaciones y/o Ampliaciones (ICSARA) mostró la disposición para reunirse nuevamente.