Indignación es lo que tienen los defensores del agua, la vida y el territorio, por el accionar antiético de TVN y Sergio Nuño. Esto, en relación al programa de Queule a Chiloé, de «La tierra en que vivimos», emitido la noche del pasado 2 de abril.
Eliab Viguera, vocero del Comité de Defensa del Mar, expresó –en entrevista con El Ciudadano– que el programa de TVN “careció de transparencia y veracidad. Tuvo una clara intensión de exculpar a los verdaderos e históricos responsables de los grandes desastres ambientales en el sur de Chile, como es Forestal Arauco”.
Viguera no sólo culpa a TVN del “lavado de la imagen delincuencial de Celco-Arauco”. Dice que un papel especial en esta “sucia tarea” lo ha tenido Tironi y Asociados. El vocero de los defensores de Mehuín estima que “la participación poco atinada de TVN busca salvar judicial y comunicacionalmente a Celco-Arauco, ante la evidencia científica y los informes periciales que demuestran su responsabilidad en el desastre ambiental cometido en el humedal del río Cruces”.
Eliab Viguera dice que la denuncia en contra del canal estatal ante el Consejo Nacional de Televisión (CNTV) “debe arrojar una sanción ejemplar por faltar a la verdad”.
Por otra parte, Viguera señaló que el Cómite de Defensa del Mar, está próximo a entregar una demanda en contra del Estado de Chile por la vulneración de los derechos de los niños, los que se habrían visto afectados por la masiva y reiterada presencia policial en la escuela de Misissipi. También preparan una demanda contra el Estado por la resolución de calificación ambiental que aprobó la construcción del ducto a Mehuín por la vulneración a los derechos de los mapuche lafkenche que esto implicaría.
Este dirigente dio a conocer este viernes 8 –a través de Radio Bio Bio, de Valdivia– unos videos realizados en 2009 durante la filmación del programa en cuestión, en los que Sergio Nuño aparece culpando a la planta Valdivia de Celco de la contaminación en el río Cruces.
ACCIÓN POR LOS CISNES
De acuerdo a lo expresado por el dirigente de Acción por los Cisnes, José Araya, TVN debiera emitir una aclaración -en la próxima edición de La Tierra en que Vivimos o en el noticiero central- en la que se reconozcan las mentiras y la parcialidad en la que incurrió «La tierra en que vivimos», y se diga la verdad respecto de quién provocó el desastre en el humedal del río Cruces.
“Si no lo hacen, van a demostrar la complicidad de un canal de señal abierta puede tener con una empresa auspiciadora. En el programa no se vela por la pluralidad, sino que se evidencia la instrumentalización que las grandes empresas pueden hacer de la TV”, afirmó.
Araya añadió “que esperamos que el Consejo Nacional de Televisión (CNTV) se tome en serio esta denuncia y tengamos un pronunciamiento ejemplar, ya que lo ocurrido constituye un precedente negativo”.
El dirigente del sur, se refirió también al proyecto de televisión digital que actualmente se tramita en el Congreso Nacional: “Quienes tiene capacidad de lobby y poder logran mantener privilegios o generar cambios en la ley que los favorecen. Es el caso de Anatel: ellos gana con esta nueva ley. No quieren más competidores en un mercado que llevan ocupando casi monopólicamente durante décadas”.
EL FRAUDE CELCO-NUÑO
La controversia generada por las denuncias de que TVN y Sergio Nuño, y la demostración de que mintieron para exculpar a Celco-Arauco de su responsabilidad en el desastre del Río Cruces, tuvo su primer gran impulso a partir de la nota: TVN y Sergio Nuño mienten para ocultar participación de Celco en desastre del río Cruces. Esta fue publicada en la web de El Ciudadano el 4 de abril.
La polémica creció luego que el CNTV acogiera a trámite –dos días después- un reclamo presentado por Acción por los Cisnes, aduciendo “un tratamiento inadecuado y arbitrario de lo acontecido en la zona de Valdivia”.
El tema escaló a un nivel de escándalo nacional tras la entrevista que la periodista de Radio Bio Bio, Bárbara Cox, le hizo el jueves 7 de abril, al gerente de asuntos públicos de la empresa Celco (Arauco), Iván Chamorro. Este reconoció que su empresa “contrató los servicios de Sergio Nuño quien facilitó material realizado para La tierra en que vivimos, con el fin de incorporarlo a la defensa corporativa que Celco hizo en el juicio dirigido por la jueza Gloria Hidalgo, del Primer Juzgado Civil de Valdivia. Este proceso, iniciado tras la querella presentada por el Consejo de Defensa del Estado (CDE) -en abril de 2005- busca determinar las responsabilidades por el enorme daño provocado al país por el desastre del humedal del río Cruces.
Luego de esto, los twiteros se encargaron de convertir este tópico en el más comentado de Chile. Expresaban su desilusión, dada la significación que tuvo en un momento de nuestra historia televisiva este programa, que otrora mostró las bellezas paisajísticas y naturales de Chile, sin que se traslucieran los egoístas intereses que hoy se han puesto en evidencia.
Ahora, que el territorio chileno está siendo devastado por industrias contaminantes y extractivas, el realizador Nuño y TVN, en vez de salir en defensa de ellas, hace una defensa corporativa de las empresas que lucran con la destrucción del territorio. Y lo hace por dinero. De ahí el escándalo, la indignación y la desilusión.
Cabe tener presente que en el citado programa de La tierra en que vivimos, Nuño también exculpo a las salmoneras del daño ambiental en laRegión de Los Lagos. Y afirmó que en la actualidad ocupan métodos productivos que evitan la contaminación del fondo marino. Esta es otra falta aguda a la verdad. Pero debe ser objeto de otra nota.
Es bueno señalar que Sergio Nuño no sólo recibe dinero de Celco para sus labores. Minera Escondida es el gran auspiciador de este programa. No está demás decir que Nuño ha tenido en sus programas un trato extraordinariamente benevolente para con esta empresa, que como el resto de las grandes mineras transnacionales, sólo traen a Chile contaminación, miseria y muerte.
Probablemente el silencio de TVN ante el fraude Celco-Nuño se deba a que la plana directiva del «Canal de todos los chilenos», tiene un fuerte compromiso con las grandes empresas destructoras del país. De hecho, el actual director ejecutivo, Mauro Valdés, al asumir debió renunciar a la gerencia de de Asuntos Corporativos y Comunicaciones de Minera Escondida.
Por Francisco Marín
El Ciudadano
VEA EL MAKING OFF DE LA TIERRA EN QUE VIVIMOS EN MEHUÍN