Todo parece indicar que unos científicos de la Universidad de Chicago averiguaron por qué las ballenas son tan grandes. Hace varios millones de años estos mamíferos medían en promedio unos 4,5 metros; una dimensión todavía considerable pero muy distinta a la que se puede apreciar en la actualidad.
Según la investigación, informa Emol, este raudo crecimiento habría tenido su origen en el período de glaciación, entre tres a cinco millones de años atrás, cuando se modificaron los océanos y también el suministro de comida de las ballenas.
Los científicos, por medio de pruebas en las que compararon las distintas especies a lo largo del tiempo, llegaron a la conclusión de que estas especies crecieron debido al aumento en la disponibilidad del alimento. Tanto el polo Norte como el Sur bajaron sus temperaturas, el hielo se expandió y se modificó la dirección de los vientos y de las corrientes marinas, lo que implicó que la comida de los cetáceos dejara de estar esparcida –de fácil obtención– y se crearan enormes buffets en cientos de kilómetros de desierto marino para ballenas.
«Si eres una ballena, la forma más fácil de aprovechar los recursos densos pero esparcidos, es creciendo», aseguró un investigador, y agregó que «si eres grande, obtienes más kilómetros por litro”.
“Los cetáceos barbados pasaron de medir 4,5 metros a 30 metros en, básicamente, el mismo tiempo que le tomó a los humanos evolucionar», finalizó.