La falta de alimentos, el hambre y la pobreza se está intensificando a consecuencia del cambio climático y del calentamiento global, pues tierras que antes eran cultivables, ya no lo son. También influye negativamente el poco espacio que existe en los barrios pobres para habilitar espacios donde cultivar alimentos.
Esa situación puede cambiar en Colombia gracias a la iniciativa de Carolina Forero, una estudiante colombiana que quiere y puede cambiar el mundo. Escribió su tesis sobre soluciones productivas para zonas pobres de su natal Colombia. El resultado de su investigación fue el ecotecho, una idea sencilla que se materializó en 2012 gracias al apoyo de una fundación privada.
Mediante una serie de talleres, Forero enseñó a la gente de la comuna a cultivar lechugas y rábanos en sus techos usando botellas PET de dos litros y agua lluvia recolectada en baldes. “Con una buena cosecha vendo una parte para hacer mercado y me quedo con el resto para mi familia y mis amigos”, afirmó la empleada Nidia Vanegas, una de las veinte dueñas de un «Techo verde». Los encargados del proyecto ahora quieren hacer lo mismo en los barrios vecinos.
Esta alternativa fomenta el desarrollo local participativo, construye tejido social y familiar, promueve el uso potencial de aguas lluvias recicladas, aumenta la biomasa vegetal y mejora la calidad del aire.