Comunidad de La Higuera tras rechazo a proyecto Dominga: «No nos vamos a descansar, el desafío es proteger la zona»

Tras el portazo que dio el SEA a Dominga, la comunidad no baja los brazos. Ahora buscarán proteger el territorio para que ningún otro proyecto se pueda instalar a destruir la naturaleza. En tanto, Andes Iron apelará la decisión, obligando al Comité de Ministros a pronunciarse sobre el proyecto portuario-minero que pretende emplazar en la comuna de La Higuera en reservas naturales y lugares de alto valor para la protección ambiental.

Comunidad de La Higuera tras rechazo a proyecto Dominga: «No nos vamos a descansar, el desafío es proteger la zona»

Autor: Javier Karmy
dominga- la higuera

Foto: www.fugadetinta.cl

“Ahora estamos con un poco de aire, respirando”, señala Andrés Álvarez, vocero y presidente del Movimiento en Defensa del Medio Ambiente de La Higuera, Modema, tras el portazo que dio el Servicio de Evaluación Ambiental de Coquimbo al proyecto portuario-minero Dominga.

Este jueves 9 de marzo se llevó a cabo una estrecha votación que se decidió con el voto del Intendente regional de Coquimbo, Claudio Ibáñez (PPD), quien rechazó la propuesta de Iron Andes, cerrando por ahora la puerta a la construcción del millonario proyecto en que hasta el ex Presidente Sebastián Piñera se ha visto involucrado.

Para Nancy Duman, de la ONG Sphenisco, que ha apoyado el proceso de resistencia de La Higuera, el voto del Intendente “fue responsable, valiente, pero también implica un desafío”, pues ahora se debe trabajar para proteger la zona y fomentar los proyectos sustentables de la comuna. “Esta decisión apunta a salvaguardar un futuro sostenible de La Higuera y de la región”, señala, agregando que -por sobre todo- “prevaleció el principio preventivo en que se fundamenta la Ley de Bases del Medio Ambiente”.

Para el dirigente Andrés Álvarez, este es un resultado que si bien “nos da un poco de tranquilidad por un tiempo, no nos permite descansar”, ya que Iron Andes ya anunció que apelará al resultado del Servicio de Evaluación Ambiental de Coquimbo, para lo cual tiene 30 días de plazo. Una vez que lo presente, la decisión la tomará el Comité de Ministros que tiene 60 días para pronunciarse y que puede solicitar mayor información a las partes involucradas.

En palabras del vocero “es lógico” que Andes Iron apele, pues “la empresa a como dé lugar quiere llevar adelante este negocio y nosotros queremos que no se haga porque nos afecta enormemente”. En la misma línea, Nancy Duman sostiene que “hoy no nos vamos a la casa a descansar y a gozar el triunfo, sino que se plantea un gran desafío que es que esta zona se proteja y que se pueda desarrollar sustentablemente”.

no-a-dominga

El voto «disciplinado» de la DC

La mañana de este jueves, Carabineros de Chile “aseguró el perímetro”, cercando de vallas papales la Intendencia de La Serena. Con una hora de retraso, a eso de las 10 de la mañana, comenzó la sesión de evaluación ambiental del proyecto Dominga. Estuvieron presentes grupos que apoyaban a la minera pero también había defensores de La Higuera que venían más bien resignados a escuchar cómo se aprobaba el proyecto.

Se abrió la sesión y el Servicio de Evaluación Ambiental (SEA) realizó una presentación del Informe Consolidado de Evaluación del proyecto. En ésta se explicó en qué consistía la iniciativa, las eventuales condiciones que posibilitarían su funcionamiento y los pronunciamientos de cada servicio. Además, el Intendente abrió un tiempo para que la ciudadanía se expresara. Varios a favor, varios en contra. Fue ecuánime. Llegó el turno de los Servicios Regionales Ministeriales (seremis) quienes uno a uno presentaron sus análisis, fundamentaron sus votos y expresaron si rechazaban, aceptaban o aceptaban con condiciones el proyecto.

dominga1La votación fue dirimida por el voto de rechazo del Intendente, quien argumentó que en el Informe Consolidado se reconocía la afectación a recursos naturales y al valor ambiental en el territorio, así como a las personas por ruidos y por material particulado. Junto con ello concluyó que las propuestas del proyecto en términos ambientales “no son apropiadas ni suficientes para asegurar como es debido el derecho a vivir en un ambiente libre de contaminación”, tal como asegura la Constitución de Chile.

Andrés Álvarez, por su parte, sostiene que tenían mucha desconfianza en la votación porque no se había tomado en serio el punto de vista técnico en el proceso y que eso se debía a que “había harta presión de parte de la empresa, todo un lobby político en distintos organismos que era transversal”. Sin embargo, lo que les generó las principales dudas fue que el “gabinete democratacristiano” votó a favor del proyecto. “Esto indica que votaron disciplinadamente de acuerdo a la visión de la DC, es decir, es un partido que no está a la altura de las demandas sociales que está requiriendo el país hoy día”, advierte.

Con esta decisión ganamos todos

Lo que pesó en la decisión final fue que se consideró que Andes Iron no había entregado la información mínima que se exige por ley. Pero quizás lo más importante, era que se estaba planteando un proyecto en una zona marina de alta productividad para la pesca artesanal, con existencia de cetáceos y de especies que son importantes para la conservación. La minera no fue capaz de asegurar que no iba a afectar negativamente tanto las áreas de manejo y explotación de recursos bentónicos de la pesca artesanal y las áreas acuícolas, como la isla Choros-Damas y la Reserva Nacional Pingüinos de Humboldt. Tampoco garantizó que la propuesta de reinyección de agua en el acuífero de Los Choros iba a ser efectivo, poniendo en riesgo el abastecimiento de toda la cuenca de Los Choros.

Nancy Duman, de la ONG Sphenisco, asegura que con el rechazo de este proyecto, incluso quienes “piensan que pierden porque iban a tener trabajo, a la larga no pierden, sino que ganamos todos”. Esto porque la zona es reconocida como de interés a nivel mundial para la conservación de la biodiversidad y el desafío para las autoridades y la comunidad es generar y fortalecer la actividad económica sostenible de la zona.

El daño que ya hizo Iron Andes en la comunidad

Manifestantes en contra del proyecto. Foto de archivo

Manifestantes en contra del proyecto. Foto de archivo

Si bien las sonrisas de los defensores de La Higuera brillaron en la capital regional de Coquimbo, Andes Iron ya ha dañado al territorio: “La comunidad quedó muy fraccionada y es un daño que va a demorar muchos años en recuperarse”, sostiene Andrés Álvarez.

Nancy Duman asegura que Dominga realizó “un trabajo absolutamente minucioso de lobby para instalar este proyecto”, incluso celebrando un año antes la aprobación de la iniciativa con quienes firmaron el Acuerdo Marco en el que se les ofreció dinero para proyectos, “siendo que recién hoy día culminó”, espeta Duman. Además, explica que Dominga hizo varios llamados para que la gente hiciera llegar su currículo generando expectativas y apoyo implícito a la empresa: “Esto es manipulación y aquí ha sido constante”, señala.

En ese sentido, Jesús Bernal, de Modema, afirma que los denominados “pro Dominga” estaban desilusionados, porque “eran 1.600 millones que iban a repartirse y ahora se les vienen abajo”.

Un futuro que promueva y proteja la naturaleza

La comunidad y las organizaciones saben que con la votación histórica de este 9 de marzo la lucha no ha terminado. “Vamos a buscar una figura legal de protección y a la vez un proyecto de desarrollo integral de la comuna que vaya en la línea de proteger y promover este tipo de reservas y santuarios de la naturaleza”, sostiene Álvarez, quien manifiesta que es necesario consolidar un proyecto alternativo y frenar la “intervención tremenda que hacen las empresas externas”.

Jesús Bernal, por su parte, apoya esa idea y manifiesta que debieran formar instancias para proteger la zona y que el proyecto Dominga no se transforme en uno distinto. “La idea no es que estemos todos los años luchando, el gran paso es que el Gobierno nos apoye con nuestra propuesta de desarrollo sustentable”, indica al respecto.


Reels

Ver Más »
Busca en El Ciudadano