Luego de que la Comisión de Evaluación Ambiental de la Región de La Araucanía votará a favor del proyecto “Parque eólico Trigales” la segunda semana de marzo, la Comunidad mapuche Autónoma Temucuicui anunció su más rotunda oposición a la iniciativa energética porque sería construido en su territorio ancestral y además porque la institucionalidad ambiental no respetó la consulta previa, libre e informada cuando se trata de proyectos que involucran a tierras indígenas.
“Cumpliendo a los lineamientos y planteamientos de nuestro trabajo de Defensa, Promoción y Demandas de nuestros derechos Políticos, Territorial y Cultural, nos oponemos rotundamente a la construcción del mencionado parque, puesto que representa para nuestra comunidad un saqueo, atentado y usurpación de nuestro Territorio Ancestral Mapuche, para lo cual recurriremos a todas las estrategias con el objetivos de defender nuestra Tierras usurpadas”, espetan desde la comunidad.
Respecto del parque, este contempla la generación de energía eléctrica a partir del empleo de 43 aerogeneradores, de 3,3 MW hasta 3,6 MW, montados sobre torres con una altura de hasta 120 metros, con aspas de hasta 65 metros de longitud, lo que implica un diámetro de rotor de hasta 130 m. Los aerogeneradores consideran una base de 22 m2, anclada a una fundación de 23,5 metros de diámetro. Además consideran plataformas de montaje del orden de 3.850 m2 que estarían situadas en la comuna de Ercilla, a kilómetro y medio de la localidad de Pailahueque, según consta en la ficha del proyecto en el sitio del Servicio de Evaluación Ambiental (SEA).
En el documento ingresado al SEA, el titular del proyecto, Parque Eólico Los Trigales SpA, con oficina en Las Condes (Santiago), indica que sí hay comunidades dentro del área de influencia de la iniciativa, específicamente las comunidades de Pitriqueo, Juan Pinoleo, Pichilen, Estefanía y Los Lolocos. Sin embargo, desde Temucuicui explican que no se les ha consultado sobre las implicancias del parque y que el Estado no respeta la normativa vigente.
“Se está pasando por encima incluso de las propias leyes que el Estado chileno ha aprobado y firmado, como son de la ley Indígena 19.253, que en su artículo 13 señala que las tierras indígenas ‘no podrán ser enajenadas, embargadas, gravadas, ni adquiridas por prescripción’, y aquí se están gravando espacios territoriales mapuche, es decir ‘imponiendo una carga sobre su territorio’, como es la instalación de un parque eólico; y además el Convenio 169 OIT, que en su artículo 13 N°2, señala que los pueblos indígenas tienen derechos a decidir sobre su territorio, es decir ‘la totalidad del hábitat de las regiones que los pueblos interesados ocupan o utilizan de alguna u otra manera’”.
Añaden que la aprobación de este proyecto transgrede las normas del Convenio 169 de la OIT sobre la Consulta Indígena y también critican las acciones de del gobierno regional. “La actuación de las autoridades regionales ha sido de “mala fe”, ya que para su aprobación, de acuerdo a los artículos 6 y 7 [del Convenio 169], la Consulta debe ser previa a su instalación, informada, realizada mediante procedimientos apropiados y a través de instituciones representativas, y debe existir acuerdo y consentimiento de las comunidades a su instalación, requisitos que aquí no se han cumplido”.
Es por ello que decidieron demarcar 8 hectáreas, que incluyen “todos los predios” en donde se construiría el parque, en cuya acción advirtieron “la devastación total de los arboles nativos milenarios que ya han sido talados para habilitar el terreno donde construirán el Parque Eólico”.
Por M.S.