La varazón fue monitoreada por la Armada, Sernapesca y la Seremi de Salud, confirmando que se trata de una medusa conocida como Aguaviva, la cual no es tóxica al contrario de la fragata portuguesa.
“Por estar compuesta en un 80% de agua y al no detectarte otras especies de medusas, no se ha decretado su retiro, ya que por su conformación se disuelven solas en contacto con el medio. Sólo si son manipulados sus tentáculos podría causar una irritación menor” advirtió el teniente Miguel Angel Bravo, capitán de puerto de Chonchi.
En tanto, el biólogo marino de la Armada, Romeo Vargas, descartó cualquier relación de la varazón con la marea roja. “Ocurren cuando hay condiciones especiales como las que caracterizan al fenómeno del Niño donde hay altas temperaturas en las masas de aguas, entonces estas medusas llegan a la costa arrastrada por corrientes marinas y masas de agua con condiciones temperatura mayor a lo normal”.
El extraño fenómeno ya había sido monitoreado por la Armada el 6 de abril pasado cuando se detectó desde el aire una mancha de medusas de 16 kilómetros de extensión a ocho kilómetros frente a las costas de San Pedro, al norte de Maullín. Esta mancha habría sido desviada por las corrientes hacia el sur y correspondería a la que está varando en las playas de Cucao.
Cabe señalar que la playa de Cucao había registrado una gran varazón de machas el 25 de abril pasado, recurso cuya musculatura, según los científicos, habría sido afectada por la alta concentración de toxina paralizante detectada en ese sector.