La Fundación Plantae lanzó una iniciativa con el objetivo de «diagnosticar, visibilizar y generar recomendaciones para mejoras las condiciones de acceso a las montañas de Chile».
Las cifras muestran que en los últimos años el interés suscitado por la cordillera ha aumentado y eso ha puesto de relieve la cantidad de lugares donde «restringen el paso con cierres o cobros […], debido a la precaria cultura que se aprecia en Chile y las malas conductas de los visitantes», como apunta la Fundación.
Con dicho objetivo, la organización, que trabaja «para la conservación, acceso y uso conscientes de los espacios naturales», ideó el proyecto de creación de un Catastro Nacional de Restricciones de Acceso a la Montaña.
De este modo, se ha puesto al alcance de la ciudadanía una plataforma digital, con un cuestionario y un mapa, para registrar los espacios de montaña que se encuentran con restricciones de acceso. El presidente de Plantae, Camilo Hornauer, mencionó que «este catastro quiere poner sobre la mesa información actualizada y proveniente de la ciudadanía, para incidir favorablemente a que entre todos mejoren las condiciones de acceso a estos espacios».
Así pues, «la idea es visibilizar dónde se encuentran estas restricciones, cómo se manifiestan y saber si son o no justificadas. Así, todos ayudamos a generar propuestas de acceso, mientras construimos una cultura de montaña adecuada», señala Hornauer. En este sentido, apunta a que «las estrategias para el cambio dependen de la voluntad política […] sin perder de vista el contexto educacional-cultural».
Con todo esto, la Fundación Plantae propuso el concepto «acceso consciente», que requiere de cambios conductuales y culturales profundos. Por su parte, Joaquín Barañao, escritor y montañista, afirmó que «imponer el paso sin limitantes no es compatible con la sociedad chilena», mientras que el montañista Gino Casassa señaló que en Chile «no hay una cultura de montaña como en Europa», pero que es bueno que esté empezando.
De este modo, la organización plantea «la construcción de un Chile más Andino, un Chile de acceso consciente a las montañas, un Chile donde no solo se garantice el acceso a la montaña, sino también, donde sus habitantes la valoren, cuiden y respeten».