Una nueva especie de reptil marino ha sido desenterrado en China. El reptil es de la era de los dinosaurios y el primer anfibio ”monstruo de mar” que se ha encontrado.
El ictiosaurio, cuyo descubrimiento fue anunciado el miércoles, viene a llenar un vacío crucial en la evolución de estos depredadores parecidos a los delfines, que prosperaron en mares Jurásicos hace aproximadamente 200.000.000 a 145.000.000 de años. Los reptiles podían crecer hasta los 20 metros de largo.
Los científicos sabían que los ictiosaurios evolucionaron desde tierra al mar, ya que se han encontrado fósiles de sus ancestros en la tierra y las criaturas marinas a veces apodados «monstruos marinos».
Entonces, los paleontólogos sospechaban que debe haber algún “ictiosaurios intermedio” por ahí. Por ejemplo ambos, las ballenas y los plesiosaurios, otro tipo de reptil marino antiguo, hicieron la transición de la tierra al mar, y los científicos han descubierto fósiles de especies de anfibios que muestran esta transición.
Hace poco, científicos excavando un sitio en la provincia de Anhui en China encontraron el espécimen que habían buscado durante mucho tiempo: un fósil de un animal de 0,5 metros de largo que vivió hace 248 millones de años, durante el período Triásico temprano.
Con un hocico corto, complexión pesada, y aletas inusualmente grandes, la Cartorhynchus lenticarpus recién descubierta se adaptaba tanto para vivir en un medioambiente terrestre como acuático, informan los investigadores en la revista Nature.
El nuevo fósil también ayuda a mostrar lo que pasó con los ictiosaurios después de la extinción masiva del Pérmico-Triásico hace 252 millones de años, en el que más del 90 por ciento de las especies marinas se extinguieron.
Los científicos siempre han querido saber cuánto tiempo tomó para los animales y las plantas en recuperarse después de la catastrófica mortandad.
El descubrimiento de la Cartorhynchus muestra que los ictiosaurios tardaron cuatro millones de años para resurgir en China antes de extenderse rápidamente por todo el mundo.
Fuente: National Geographic