Existe un largo debate en torno a si es posible ser omnívoros sustentables. Actualmente, los métodos para producir la carne que muchos de nosotros consumimos dejan mucho que desear. El abuso de antibióticos, maltrato animal, la enorme cantidad de desechos producidos y la falta de higiene, han convertido a esta industria en una de las más controversiales entre aquellos que buscan cuidar del medio ambiente.
Para muchos de nosotros se trata de buscar una proteína animal que sea responsable tanto con el medio ambiente como con los animales. Para decidir si esto es posible, el Doctor Michael Mosley, del Reino Unido, se dispuso a encontrar la proteína animal más responsable y publicó sus resultados en el portal de noticias de la BBC. Mosley viajó por el Reino Unido y Estados Unidos recolectando data de granjas industriales y orgánicas, que producen carne de res, borrego, cerdo, pollo, pescado y otros mariscos.
Considerando que casi un tercio de la superficie de la tierra que no está cubierta por hielo se utiliza para criar animales, ya sea para comer o por su leche y que alrededor del 30% de las cosechas que cultivamos son para alimentar a los animales, este ejercicio es de importancia vital.
Sus resultados fueron los siguientes:
A través de una técnica llamada Life Cycle Analyisis, los científicos han logrado estimar el impacto ambiental de diferentes tipos de carne.
Los que más contaminan son aquellos animales que comen pasto y producen metano, como las vacas y los borregos.
Los cerdos y las gallinas, que comen una dieta mucho más variada, contaminan mucho menos.
Los mejillones son los más eco-amigables, ya que criarlos requiere muy poca energía.
Otro aspecto que Mosley menciona, y que debemos considerar, es que no todos los animales nos ofrecen la misma cantidad de carne por la contaminación que producen. Las cifras que debemos tener en mente son:
Una vaca produce 16 kilogramos de dióxido de carbono por cada kilo de carne.
Los borregos producen 13 kilogramos de dióxido por cada kilo de carne.
Los cerdos producen alrededor de 8 kilogramos de dióxido por kilo de carne.
Las gallinas 4.4 kilogramos de dióxido por kilo de carne.
Estos niveles pueden variar de acuerdo al tipo de producción, pero lamentablemente —al menos en lo que concierne los niveles de dióxido que producen— Mosley asegura que tanto las gallinas como las vacas criadas en condiciones industriales (es decir, no orgánicas) producen menos contaminación porque se alimentan a base de maíz.
Según Mosley, la proteína animal más eco-amigable es también la que requiere menos tecnología: los mejillones. Los mejillones producen 50 veces menos dióxido de carbono que la carne de res y además lo atrapan dentro de sus conchas. Otras alternativas, que son menos populares que los mejillones, son los insectos.
Mosley concluye su artículo con unconsejo: “si quieres ser un carnívoro ambientalmente responsable, lo mejor que puedes hacer es consumir menos de 100 gramos de carne por día.”