La Coordinadora Nacional para la Reducción de Desastres (Conred) de Guatemala lideró este lunes la evacuación de la aldea El Rodeo, al oeste de la capital, por descenso de material de lahar por la barranca Las Lajas. «La evacuación se realiza con apoyo de camiones del Ministerio de la Defensa Nacional, ya que el lahar se desbordó por la zona de afectación», informó.
Los lahares son fluidos compuestos de sedimentos volcánicos con una gran cantidad de agua y pueden ocurrir aunque el volcán no esté en erupción. Se trata de una avalancha de productos volcánicos que busca los cauces de los ríos para seguir su trayectoria y son altamente destructivos debido a la gran velocidad que toman y a su alta densidad.
Adicionalmente, brigadas de la propia Conred, de los bomberos, del Ejército y expertos internacionales ingresaron a la denominada «zona cero», en la comunidad San Miguel Los Lotes, en el departamento sureño de Escuintla.
Los socorristas se unieron a los pobladores de San Miguel Los Lotes, en un último esfuerzo para encontrar los cuerpos de casi 200 desaparecidos en el poblado devastado por las erupciones volcánicas.
Las erupciones del Volcán de Fuego que comenzaron el pasado 3 de junio en Guatemala han dejado hasta el momento 114 muertos y más de 200 desaparecidos, según las últimas cifras publicadas por el Instituto Nacional de Ciencias Forenses (Inacif).
VOLCÁN DE FUEGO: Debido a las constantes lluvias en el área del volcán de Fuego se registra a esta hora el descenso de lahar en la barranca Las Lajas y El Jute, las dimensiones son aproximadamente entre 35 a 55 metros de ancho y 5 metros de alto, provocando vibración a su paso. pic.twitter.com/gTj92Reh5j
— CONRED (@ConredGuatemala) June 12, 2018
De momento, la Conred también informó que, debido a las lluvias, las operaciones de búsqueda fueron suspendidas este lunes y se reanudarán el martes.
Asimismo, el Instituto Nacional de Sismología, Vulcanología, Meteorología e Hidrología (Insivumeh) recomendó a las brigadas realizar las labores de búsqueda y rescate solo en horas de mañana, porque luego aumenta la posibilidad de lahares.
La constante actividad volcánica de la montaña de 3,763 metros de altura, situada a 35 kilómetros al suroeste de Ciudad de Guatemala, pone en peligro las labores de rescate, pues sigue lanzando flujos piroclásticos, una mezcla de gases tóxicos, piedras y materia volcánica que baja a gran velocidad y arrasa todo lo que encuentra a su paso, según el Insivumeh.