La organización internacional de conservación marina Oceana llamó a las autoridades a sancionar a quienes resulten responsables de la muerte masiva de aves en Punta de Choros, región de Coquimbo, donde se encontraron varados y sin vida más de 600 guanays y pingüinos.
“La muerte de estas especies podría estar asociada a la acción de lanchas cerqueras. Incluso se ha hablado del uso de dinamita para matar a los lobos marinos que se comen las capturas. Si esto se confirma debería aplicarse la mayor sanción posible a los responsables”, explicó Alex Muñoz, director ejecutivo de Oceana.
En el marco de un control ciudadano que monitorea constantemente la zona, el pasado viernes 10 de mayo se vieron diez lanchas pesqueras que se acercaron a la playa frente a la desembocadura de la Quebrada Los Choros. Según denunció el Movimiento en Defensa del Medio Ambiente (Modema), dos días después comenzaron las primeras varazones de aves marinas muertas, entre ellos Piqueros, Patos Yeco, Pelícanos y Pingüinos de Humboldt. El Servicio Nacional de Pesca ya constató en terreno la muerte de las especies, y la Armada de Chile se encuentra inspeccionando las naves del lugar.
No es la primera vez que se registran muertes masivas en la zona. En abril de 2012 vararon alrededor de 350 guanays, y en mayo de ese año, el Servicio Nacional de Pesca denunció el varamiento de 80 lobos marinos en la misma playa.
Para abordar esta situación, Oceana hizo un nuevo llamado a que se apruebe el Área Marina y Costera Protegida en La Higuera e Isla Chañaral, propuesta en 2010 por esta entidad en conjunto con científicos de la Universidad Católica del Norte y del Centro de Estudios Avanzados en Zonas Áridas (Ceaza). Con esta figura se busca resguardar la vida marina de la zona, promover actividades sustentables como la pesca artesanal o el turismo de naturaleza, y evitar aquellas que causan graves impactos ambientales, como la pesca de arrastre y las termoeléctricas.
La propuesta de Oceana para un AMCP abarca una superficie marítima de 3.445 km2 y una línea costera de unos 294 km en el continente, extendiéndose desde Caleta Chañaral de Aceituno, en la Región de Atacama, hasta Caleta Los Hornos, en el límite sur de la comuna de La Higuera, en la Región de Coquimbo. Allí habitan las mayores poblaciones de pingüinos de Humboldt del mundo, colonias de delfines nariz de botella, nutrias de mar, y aves y mamíferos marinos como ballena azul, minke o jorobada.
“Si bien existen dos reservas marinas en el área, este ecosistema es mucho más amplio y tiene escasa protección frente a amenazas como la práctica de la pesca de arrastre o el uso de otros métodos destructivos como los que aparentemente causaron la muerte de estas aves”, finalizó Muñoz.
Santiago, 15 de mayo de 2013