Habitantes de Castro, Isla Grande de Chiloé, están en alerta por la aparente disminución de la población de cisnes en la bahía de Ten Ten, sector que corresponde a la entrada norte de la ciudad, según informó La Estrella de Chiloé.
La desaparición de las aves nativas sería producto del ataque de los perros de las casas del sector. En este sentido, el matutino habla de la circulación de un video a través de WhatsApp, que muestra muestra a un perro atacando a un cisne de cuello negro en la bahía de Ten Ten.
«Ese video llegó por medio de la junta de vecinos que tiene un WhatsApp y la persona que lo envió después se arrepintió y se retiró del grupo», señaló Claudia vida, usuaria de Facebook, que compartió la grabación en su muro.
La denunciante aseguró que «este no es un caso asilado, porque se nota que hay muchos menos cisnes, ya que hace 15 días había casi 100 y ahora son pocos, unos 10 o 20».
Y agregó: «Me contaron de la municipalidad que habían que habían llamado para denunciar que los perros estaban atacando a los cisnes de nuevo, o sea, eso significa que esto no va a mermar hasta que se trate a esos perros, pero el problema es que los dueños no están ni ahí».
En tanto, Jorge Valenzuela, biólogo del Centro de Estudios y Conservación del Patrimonio Natural (Cecpan), afirmó a La Estrella de Chiloé que «esto se enmarca en lo que se viene reiterando frente a la falta de instancias de conversación, ante la necesidad de más acción en cuanto a la tenencia responsable, no solamente dejarla supeditada a que alguien en algún lugar va a llegar y solucionar las cosas».
Sobre este caso, Valenzuela puntualizó que en este caso «está identificada la casa, incluso, de donde son los peros, pero esto puede ser algo que será puntual ahora y después se va a volver a reiterar con otro perro. En Caulín y Manao también hay videos de perros que han atacado cisnes y siempre hay un común denominador, que es la indiferencia de los dueños por lo que hacen sus perros fuera de sus casas».
En relación a la denuncia por la disminución de ejemplares en Ten Ten, el biólogo aclara que «no necesariamente se debe a que hayan muerto, sino lo más probable es que los cisnes ahora se sienten amenazados en ese rincón porque son muy fáciles de atrapar y para un perro es muy sencillo cuando baja la marea y pillarlos en los pequeños esteros que se forman, ya que ellos se demoran en elevar el vuelo desde lugares que no tienen mucha agua».