La temporada de invierno arrancó en Rusia a todo pulmón. Un ciclón de nieve y una lluvia helada azotaron este fin de semana la región del Lejano Oriente. Las imágenes difundidas por la agencia Sputnik muestran las consecuencias -en algunos casos devastadoras- que dejó este fenómeno climático.
El portal Perfil citó a medios rusos que aseguraron que las regiones con mayores daños fueron Primorie y Vladivostok. En estos territorios con comunes las bajas temperaturas. Entonces, cuando la lluvia cae con fuerza el agua entra en contacto con frialdad del clima, se convierte en hielo y queda “detenida en el tiempo”.
Al respecto, el Kremlin reconoció los enormes «enormes desastres» que dejó el ciclón en la infraestructura de esas regiones. Los desperfectos se concentraron en los postes de electricidad, haciendo que 120.000 personas se quedaran sin luz, ni calefacción, ni agua.
La lluvia gélida comenzó en la ciudad de Vladivostok, la noche del 19 de noviembre. Luego se extendió a otras ciudades y al día siguiente se produjo el corte de los servicios. Según el Gobierno, este fenómeno climático no ocurría desde hace 30 años.
Adicionalmente, grandes cantidades de personas transitaron las calles congeladas por la lluvia en algunas partes. Incluso, quedaron impactadas tras ver árboles, arbustos y flores cubiertos de capas de hielo, reseñó Perfil.
Lamentablemente, las autoridades reportaron al menos un fallecido debido al ciclón, además de incontables daños materiales. La primera respuesta del Gobierno fue enviar brigadas de apoyo para atender la emergencia y habilitó refugios para los desamparados.
Todas las imagenes son de la agencia Sputnik.