«Es imperioso que el secretismo y blindaje en el que opera la megaminería, y en especial Codelco, se termine»

Organizaciones ambientalistas han criticado la poca responsabilidad de la estatal y han solicitado información detallada sobre los derrames de concentrado de cobre que han tenido lugar en el marco de sus operaciones. El último fue el pasado 9 de octubre tras el descarrilamiento a las orillas del río Blanco de un tren que opera en la División Andina.

«Es imperioso que el secretismo y blindaje en el que opera la megaminería, y en especial Codelco, se termine»

Autor: CVN
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Ante el derrame de concentrado de cobre del tren metalero perteneciente a las operaciones en la División Andina de Codelco  que tuvo lugar el viernes pasado camino a Los Andes, diversas organizaciones sociales y ambientalistas, entre las que se encuentran Greenpeace Chile y el Observatorio Latinoamericano de Conflictos Ambientales (OLCA), han emitido un comunicado en el que denuncian la recurrencia de los descuidos ambientales de la estatal en el último mes y solicitan información responsable y completa sobre los incidentes ocurridos.

Descarrilamiento de tren a orillas del río Blanco, afluente del río Aconcagua el pasado 9 de octubre.

Descarrilamiento de tren a orillas del río Blanco, afluente del río Aconcagua el pasado 9 de octubre.

«En menos de un mes han ocurrido dos derrames graves de concentrado de cobre en faenas de Codelco, uno en caleta Palito, bahía de Chañaral, y el último hace tres días a orillas del río Blanco. En ambos las autoridades y la empresa le han bajado el perfil a los hechos, y los medios de comunicación han guardado un silencio cómplice», han afirmado, al tiempo que piden que la compañía aclare con exactitud la dimensión de estos desastres y dé cuenta del plan de emergencia en el caso del derrame en Andina, que, aunque afortunadamente no llegó a contaminar las aguas del río Blanco -afluente del Aconcagua- en un primer momento, amenaza con hacerlo de concretarse la previsiones de lluvia.

«Del mismo modo, es urgente que las organizaciones de salud y fiscalización ambiental den cuenta de los procesos que han implementado para tomar conocimiento de la situación en el río Blanco y las medidas desplegadas para mitigar y contener sus efectos. Es urgente que los servicios públicos (superintendencia de medio ambiente, Seremi de Salud, DGA, Sernageomin, Seremi de Transportes, Municipio de Los Andes) se hagan presente y fiscalicen la situación con muestreos independientes para disponer de información a la brevedad, de modo de garantizar que la salud de los habitantes del río Aconcagua y la producción agrícola, sobre todo de la primera sección no se dañe», sostienen.

La misiva critica el plan extractivista de la estatal, «que a la postre ha generado dependencia, depredación, altísima conflictividad socioambiental, y niveles de contaminación cada vez más preocupantes» y considera de imperiosa necesidad de «que esta actitud de secretismo y de blindaje en la que opera la megaminería y en especial Codelco se termine».

«Proponemos que se constituya una mesa de trabajo sobre los riesgos del transporte y almacenamiento de este tipo de cargas, con una participación real de la sociedad civil y de los organismos competentes en la materia, para diseñar mecanismos que resguarden a los territorios y comunidades frente a este tipo de incidentes», finalizan.

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