Un nuevo caso de intoxicación masiva por plaguicidas se produjo la semana pasada en la comuna de Coltauco, en Rancagua (Región de O’Higgins) donde 40 temporeras fueron prácticamente fumigadas por un avión, mientras efectuaban labores de retoque de uva de exportación en el fundo Santa Rosa de la Agrícola Vial.
El Secretario Regional Ministerial de Salud doctor Genaro González Fierro inició de inmediato el respectivo sumario sanitario, pero la Asociación Chilena de Seguridad, por boca del funcionario Carlos Moya, intentó desmentir la información asegurando que se trataba de una «crisis de ansiedad colectiva» de las trabajadoras y no de una intoxicación.
Esta es una práctica histórica de la ACHS que busca ocultar los casos que está obligada a recibir y denunciar. Sólo falta ahora que el SAG se sume al intento de negar los hechos, como ya hizo cuando cerca de 500 trabajadores resultaron intoxicados en noviembre pasado, en la Región del Maule.
CONDUCTA EMPRESARIAL
El senador por la zona Juan Pablo Letelier denunció los hechos considerando inexplicable que una empresa que exporta fruta a exigentes mercados externos, donde hay leyes muy claras, viole las normas. Agregó que además de negligencia pudiera haber una actitud culposa que deberá ser investigada por la justicia.
Las trabajadoras fueron atendidas en la Asociación Chilena de Seguridad con síntomas claros de de intoxicación aguda por plaguicidas, es decir mareos, vómitos y desmayos. Esto ocurrió alrededor del mediodía del viernes 22 de enero. El Seremi Genaro González afirmó por su parte que las mujeres fueron afectadas por la propagación de un fungicida con el que se fumigó parte del fundo dos horas antes de que el grupo comenzara sus labores. La norma regional establece que debe ser con cuatro horas de antelación. Funcionarios del Departamento de Salud Laboral de la región se encuentran en terreno recogiendo datos para el sumario sanitario.
Según se informó en la prensa, a las 11.30 horas del viernes se inició una segunda fumigación cerca de donde cosechaban. «Estábamos trabajando y apareció una neblina de humo. Todas empezamos a sentirnos mal, mareadas y a vomitar. Estaban fumigando a cinco metros de nosotras», comentó una de las temporeras atendida en la Asociación Chilena de Seguridad de Rancagua (ACHS).
TRES FALLECIDOS EN 2009
Hasta noviembre de 2009, según la Red de Vigilancia Epidemiológica -Revep- del Ministerio de Salud, se habían producido en esa región de la zona central 3 brotes (intoxicaciones masivas), de origen laboral; había 71 casos registrados de intoxicaciones y 3 personas habían fallecido por intoxicación aguda producida por plaguicidas. 19 personas de esa región intentaron suicidarse en 2009, ingiriendo plaguicidas.
Estimaciones basadas en los antecedentes oficiales, a los que se suman los últimos casos conocidos públicamente, permiten elevar el total de intoxicaciones registradas en el país en 2009, a una cifra total muy superior a los 700 casos. En 2008 se registraron 849 casos, según Revep, superando la cifra de 2007 que ascendió a 727 casos. El total de intoxicados en 2009 aún no es publicado oficialmente por la Revep, sin embargo se dieron a conocer las estadísticas enero-noviembre con un total de 391 casos de intoxicaciones registradas y 8 fallecidos.
Ese informe no incluye el brote más masivo de la historia del uso de plaguicidas en Chile, ocurrido el pasado 23 de noviembre en la Región del Maule, que elevará considerablemente la cifra. El informe oficial adelanta que «probablemente son más de 300 los trabajadores afectados» por ese brote. Las informaciones recogidas por RAPAL llevan la cifra a un número cercano a los 500 afectados. Hay que recordar que se estima que por cada caso que se registra oficialmente, hay otros cuatro que no son notificados a la autoridad sanitaria, lo que hace que la cifra real sea superior a los tres mil casos anuales.
Tampoco está disponible aún la cifra oficial de intoxicaciones registradas en diciembre de 2009. El período que va entre septiembre y marzo concentra el mayor número de casos y brotes de intoxicación aguda por plaguicidas, por hechos que ocurren fundamentalmente en los predios de la agroexportación. En esa región hay registradas un total de 5.010 empresas agrícolas y el trabajo rural concentra un 33% de la fuerza de trabajo regional, con cifras que se acercan a los 99.000 trabajadores, la mayor parte de ellos temporeras y temporeros que desarrollan su trabajo en precarias condiciones de seguridad y respeto a sus derechos laborales.
Un informe oficial del Departamento de Salud Ocupacional de la Región de O’Higgins sobre aplicaciones aéreas realizadas en Rancagua el año 2008, revela que se realizó un total de 90 fumigaciones, sin denuncias de intoxicación registradas asociadas a este hecho en ese período. En la región, el total de aplicaciones aéreas ascendió ese año a 431, muchas de las cuales se hacen utilizando plaguicidas altamente tóxicos, tales como el insecticida organofosforado Lorsban.
Fuente: Rapal-Chile / www.ecoceanos.cl