Las nuevas iniciativas promovidas por la ministra de Medio Ambiente, María Ignacia Benítez, apuntan fundamentalmente a la reducción del material particulado fino, proveniente del parque automotriz.
Dentro de las iniciativas dadas a conocer por la titular de la cartera, están la implementación de convertidor catalítico a las motocicletas -en 9 meses más-, nuevas exigencias a los autos y a la calidad de los cumbustibles.
En tanto, Lucio Cuenca, del Observatorio Latinoamericano de Conflictos Ambientales (Olca), recalca que las medidas no cumplen con el objetivo de descontaminar efectivamente la urbe, debido a que no se trata de medidas estructurales como lo serían el congelamiento de la expansión urbana de la capital y desinsentivar el uso del automóvil particular.
Vea más detalles sobre esta controversia en la nota de El Ciudadano TV.
“NUEVA ACTUALIZACIÓN DEL PLAN DE DESCONTAMINACIÓN DE LA CAPITAL NO GARANTIZA QUE SANTIAGO MEJORE LA CALIDAD DE SU AIRE»
El lunes 5 de abril la Contraloría finalmente visó el Decreto Nº 66/2010 que actualiza el Plan de Prevención y Descontaminación Atmosférica de Santiago y hoy jueves 08 de abril la Ministra de medio Ambiente, María Ignacia Benítez, junto al Intendente de la región Metropolitana, Fernando Echeverría y al Ministro de Transportes, Felipe Morandé, sin que aun se oficialice, dieron a conocer en una actividad pública, parte de las medidas que se incorporan en este Plan.
Frente a este nuevo Plan de Descontaminación de Santiago, Paola Vasconi, Coordinadora del Programa de Medio Ambiente de Fundación Terram señaló que “las medidas implementadas no garantizan que mejore la calidad del aire, ya que el Plan no aborda en su totalidad la problemática del aire de Santiago, pues medidas como la expansión urbana de la ciudad y la relocalización de industrias en la región quedaron fuera”.
A juicio de Vasconi, se continúa enfrentando la problemática del aire de manera puntal, no con una visión global, ya que como desde Fundación Terram han sostenido desde hace tiempo, el problema de la contaminación en la Región Metropolitana es estructural y tiene relación con la capacidad de carga de la cuenca, agudizada por la expansión urbana horizontal de la ciudad, el crecimiento poblacional, el aumento del parque automotriz y las actividades económicas que en ella se desarrollan. Todos indicadores que en los últimos años ha aumentado significativamente, sin ningún control o planificación de parte de la autoridad.
La profesional reconoció que si bien, esta segunda actualización del Plan ha sido un proceso largo, que comenzó con la publicación de la segunda auditoria en el año 2006, muchas de las observaciones presentadas por las organizaciones que participaron activamente en todo el proceso, no fueron incorporadas finalmente en este Plan, un claro ejemplo de que no se consideró, una vez más, todos los aportes provenientes desde la ciudadanía.
Según Vasconi, “aquí lo que se necesita es una mirada de ciudad, una mirada de largo plazo. No es posible que teniendo en promedio un Intendente por año en Santiago se puedan concebir y consolidar las políticas necesarias para que la capital pueda combatir eficazmente la contaminación y se convierta en una ciudad con una buena calidad de vida. Hasta ahora el modelo institucional y las autoridades que ha operado detrás del PPDA ha imposibilitado diseñar y aplicar planes eficientes para descontaminar el aire de la capital”.
Finalmente la Coodinadora del Programa de Medio Ambiente de Fundación Terram señaló que “habrá que esperar cuando se implemente la nueva institucionalidad ambiental, para ver cómo finalmente operarán los planes de descontaminación para Santiago y las regiones”.
El Ciudadano