Según una nueva investigación, más de mil millones de personas en el mundo podrían verse obligadas a abandonar sus hogares debido al calentamiento global.
Este desplazamiento de personas, así como los diversos efectos del cambio climático, podrían estar a punto de provocar una gran crisis de salud, según un nuevo estudio publicado por The Lancet.
El calentamiento global ya está llevando a algunos estudiosos a la conclusión de que los llamados migrantes del cambio climático se están viendo forzados a moverse debido a los cambios extremos en las cantidades de lluvia y a los cambios de temperatura que arruinan su capacidad para mantener los cultivos.
El artículo señala que «la migración impulsada por el cambio climático tiene impactos potencialmente graves en la salud mental y física, tanto directamente como a través de la interrupción de los servicios sociales y de salud esenciales».
La nueva investigación reúne una serie de diferentes estudios que analizan los impactos del cambio climático en la salud. Sugiere que el posible impacto en la salud de las personas podría ser enorme, y que los gobiernos deben actuar rápidamente para disminuir la contaminación del aire y abordar otros problemas ambientales, antes de que comiencen a matar a la gente.
El estudio concluye que las personas pueden adaptarse a algunos de los cambios menos drásticos, pero hay límites para la cantidad de gente que se puede adaptar, y que por eso los gobiernos deben trabajar arduamente, tanto para mitigar los efectos del cambio climático como para ayudar a las personas a adaptarse a ellos, en un intento por enfrentar esta potencial crisis de salud.
El artículo dice que si se consideran estas recomendaciones, se podría evitar desastres a futuro. «Los indicadores revelan algunas advertencias severas para la salud humana, así como algunos destellos de esperanza», dijo la Dra. Clare Goodess, investigadora principal de la Unidad de Investigación Climática de la Universidad de East Anglia.
El impacto de la contaminación del aire en las ciudades del Reino Unido forma parte de una importante investigación que analiza los costos sanitarios y sociales del cambio climático en todo el mundo, la que fue liderada por una importante revista médica.
El estudio ‘The Lancet Countdown on Health and Climate Change’ reunió a 24 instituciones y organizaciones intergubernamentales, incluidas la OMS y la Organización Meteorológica Mundial.
El estudio señala que la exposición mundial a niveles peligrosos de contaminación atmosférica, causada por la quema de combustibles fósiles, había aumentado en un 11,2% desde 1990, con más de un 70% de ciudades que exceden los límites de PM2,5 (partículas en suspensión de menos de 2,5 micras) de la OMS.
Los autores reconocen que las directrices de calidad del aire de la Unión Europea son mucho menos estrictas que las de la OMS, con un límite de seguridad superior de de 25 microgramos por metro cúbico para PM2,5. Sin embargo dijeron que los límites de la OMS representaban un «umbral más seguro».
El informe señala que entre 2000 y 2016 hubo un aumento del 46% en el número de desastres relacionados con el clima en todo el mundo. Durante el mismo período de tiempo, 125 millones de adultos vulnerables mayores de 65 años estuvieron expuestos a olas de calor.
El cambio climático también ha incrementado la amenaza de enfermedades infecciosas transmitidas por mosquitos. La transmisión del dengue por el mosquito Aedes agypti aumentó en un 9,4% desde 1950.
El profesor Hugh Montgomery, copresidente de The Lancet Countdown y director del Instituto de Salud Humana y Desempeño del University College de Londres, dijo que «recién estamos empezando a sentir los impactos del cambio climático».
«Cualquier pequeña cantidad de resiliencia que hoy demos por sentada, se extenderá hasta un punto de quiebre, antes de lo que podemos imaginar», concluyó Montgomery.
Fuente, The Independent
El Ciudadano