La creación se formalizó oficialmente, con una comitiva de Consejo de Ministros para el Desarrollo de la Política Oceánica, el que estará conformado por los ministros de Relaciones Exteriores, Heraldo Muñoz; del Medio Ambiente, Pablo Badenier; de Defensa, José Antonio Gómez; y de Economía, Luis Felipe Céspedes.
Con este hito, la protección oficial del territorio marítimo en las islas oceánicas llega a los 450 mil kilómetros cuadrados, triplicando los 150 mil km2 que teníamos protegidos hasta ahora. Es un tremendo desafío y un reconocimiento al patrimonio natural que tiene nuestro país, que debe incrementar su conocimiento y que debe resguardarlo para las futuras generaciones“, dijo el ministro del Medio Ambiente, Pablo Badenier.
En esto, agregó el ministro Badenier, cumplirá un rol fundamental el futuro Servicio de Biodiversidad y Áreas Protegidas, actualmente en trámite en el Congreso. “Lo que buscamos es que este futuro servicio administre y gestione todas las áreas protegidas de Chile, terrestres y marinas”, explicó
Las islas San Félix y San Ambrosio don de origen volcánico y se ubican a 910 km en línea recta desde la costa de Chile continental, a la altura de Caldera (Atacama). Los ecosistemas y la biodiversidad marina de las Islas Desventuradas presentan condiciones excepcionales. El 72% de las especies de peces son exclusivos de estas islas, y las tasas de endemismo para especies profundas son de 41% en peces y el 46% de invertebrados. Son los índices de endemismo más altos jamás registrados en el mar.
Tras la declaratoria oficial del parque marino, se diseñarán, en conjunto con la comunidad y la academia, los planes de manejo de estas áreas para que su protección sea efectiva y beneficie a la comunidad que depende de ellas.
Las Islas Desventuradas son un área importante para el crecimiento del jurel, de alimentación del pez espada y una posible área de alimentación y/o descanso de la ballena azul. Su protección contribuirá a la repoblación del jurel como recurso pesquero para Chile y a asegurar el futuro de las poblaciones de langosta (Jasus frontalis) y una pesca sostenible del recurso.