El pasado lunes organizaciones ciudadanas, municipales y parlamentarios enviaron una carta dirigida a Francesco Starace, CEO y director general de Enel Italia, con el objetivo de emplazar a la transnacional energética a cerrar el cuestionado vertedero de cenizas en la comuna de Coronel, en la Región del Bío Bío, y a planificar el cierre o reconversión de sus unidades termoeléctricas a carbón.
En la polémica carta se da cuenta de que la Brigada de Delitos Ambientales de la Policía de Investigaciones (PDI) determinó que las dos plantas de Enel han depositado material particulado en el suelo de Coronel, «contaminando el subsuelo, aire y bahía de la ciudad», y se acusa la ilegalidad del reabierto vertedero de cenizas de la compañía emplazado en una zona prohibida para dicha actividad, según el Plan Regulador de Concepción. Además, se apunta que este último no cuenta con Permiso de Edificación y tampoco se ha construido la infraestructura para la mantención y control del vertedero necesarias.
La solicitud de las 17 organizaciones ciudadanas y los 11 senadores y diputados chilenos a Enel Italia incluye el cierre durante 2019 de la unidad termoeléctrica a carbón Bocamina 1, del vertedero de cenizas de Enel y el cierre o reconversión -antes de 2029- de las centrales Bocamina 2 y Tarapacá, junto con sus depósitos de ceniza.
Además, se exige la restauración del medio ambiente terrestre y acuático afectado por estas centrales y los vertederos de cenizas, y que se cumpla el compromiso de la construcción de una nueva escuela para reemplazar la contaminada Rosa Medel de Lo Rojas, de Coronel.
En ese sentido, Sara Larraín, directora ejecutiva de Chile Sustentable, reafirma la demanda de que «Enel debe cerrar hoy su central a carbón Bocamina 1 que ha contaminado por 49 años a la ciudad de Coronel en el sur del país. También debe cerrar el vertedero de cenizas que posee en el área urbana de Coronel, donde está prohibido instalar vertederos por su grave afectación a la salud de la población. Este año en el contexto de la COP25, Enel debe anunciar el cierre de todas sus carboneras en Chile».
Por su parte, Ariel Durán, miembro del Concejo Municipal de Coronel, sostiene que «las operaciones de Enel en Coronel han causado un grave deterioro social y ambiental: erradicaciones forzadas y contaminación por metales pesados son la huella del carbón de Bocamina y su vertedero de cenizas».
Las organizaciones han señalado que esperan que la misiva enviada el CEO y director general de Enel en Italia obtenga una respuesta coherente con el Plan Estratégico 2019-2021 que la compañía ha comprometido, estableciendo un enfoque de «valor compartido» para las comunidades y las personas donde funcionan unidades a carbón de Enel Group.
Fuente: Comunicaciones Chile Sustentable