Al parecer, el cambio climático provocado por los humanos es un problema que simplemente no va a terminar. Aumentará la probabilidad de conflicto en las regiones con escasez de agua, y ya hay cierta evidencia de que esta escasez jugó un rol en gatillar el levantamiento inicial en Siria, en 2011.
Investigadores del Instituto Max Planck de Química y del Instituto de Chipre en Nicosia, han estado estudiando por algún tiempo los efectos del cambio climático en las regiones áridas de Medio Oriente y de África del Norte, y han llegado a una conclusión escalofriante. Aún con el acuerdo de la Cumbre de París, reforzado por todos los signatarios –quienes se han comprometido a limitar el calentamiento a no más de 2°C–, estos lugares del mundo se volverán tan calurosos, que en el futuro cercano serán inhabitables.
El estudio fue publicado en la revista científica Climatic Change, y señala que las temperaturas de verano más altas en la región, se elevarán casi el doble de rápido en comparación con el promedio global. Las temperaturas alcanzarán regularmente los 46°C y los días de calor extremo serán cinco veces más frecuentes que lo que han sido en los últimos 200 años.
Con el acuerdo de París, este escenario es optimista; pero aún así, hacia 2050 las temperaturas no bajarán de 30°C en la noche. Este ambiente, combinado con una creciente polución del aire y grandes tormentas de arena, será cada vez más difícil de habitar, por lo que se espera un éxodo masivo y prolongado.
Pero si las autoridades no se adhieren al acuerdo de París como se espera, las cosas se volverían mucho, mucho peores. Bajo el modelo usual y acostumbrado, en 2100, las personas que viven en la región experimentarán 200 días de calor extremo cada año.
«En el futuro, el clima en los lugares extensos de Medio Oriente y de África del Norte, podría cambiar de tal manera que la propia existencia de sus habitantes estaría en peligro», señala Jos Lelieveld, autor principal y director del Instituto Max Planck de Química.
Para hacer sus predicciones, el equipo usó 26 situaciones simuladas de cambio climático que consideran dos escenarios: en el primero, se asume que las emisiones de gases invernadero caen desde 2014, lo que concuerda con los objetivos del acuerdo de París; en el segundo, se asume que nada se soluciona y que, como resultado, el mundo se calienta a un promedio de 4°C.
Es desoladora la idea de que, no importa cuánto se haga para solucionar este problema, algunas regiones del mundo -áreas cercanas al ecuador, por ejemplo- están inexorablemente condenadas; al menos hasta cierto punto.
Como destaca el estudio, los desiertos se volverán increíblemente hostiles a la vida. Estas áreas climáticas no amortiguan bien el calor y son ineficientes en enfriar el ambiente a través de la evaporación de agua. En estos lugares, y más que en casi ningún otro lugar del mundo, el efecto invernadero se amplificará a un nivel muy desproporcionado.
Muchas personas que observan la crisis de refugiados de Europa se desesperan y discuten acerca se sus miles de causas posibles -guerra, violencia sectaria, intereses económicos, petróleo, intervención europea, etc. Pero en el futuro cercano, otro tipo de crisis de refugiados se volverá lugar común; serán los refugiados del clima. Esta vez, la causa no será motivo de debate.
CCV, El Ciudadano