El proyecto, innovador tecnológicamente en Sud América, propone un uso sustentable del carbón para generar energía eléctrica y es fruto de una alianza chileno-australiana (Antofagasta Minerals S.A / Carbon Energy ) que en su fase piloto cuenta con una inversión de 14 millones de dólares y será ejecutado por Mulpun Energy, en la comuna de Máfil, Región de Los Ríos, sobre mineral descubierto por la carbonífera Catamutún. El yacimiento tiene 70 millones de toneladas probadas que están a 250 metros de profundidad y ciudadanos preocupados por planta piloto acusan falta de información.
No habrá palas mecánicas extrayendo el mineral, tampoco montañas de desechos, ni menos material particulado en suspensión. En la superficie sólo será visible una instalación de 100 x 50 metros, desde la cual se inyectará aire hacia donde se encuentra el mineral, para que, por medio de un proceso llamado gasificación in situ (Underground Coal Gasification), produzca gas de síntesis con la finalidad de usarlo para generar electricidad.
Para Mario Pino, geólogo del Instituto de Geociencias, de la Universidad Austral de Chile (Uach), este “es un proyecto interesante y de bajo impacto medioambiental, pues el trabajo de minería se realiza de manera subterránea, lo que permite que el uso de suelo, en la superficie, siga siendo agrícola, donde las vacas podrán seguir pastando”.
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Una de las problemáticas de la minería tradicional del carbón y que, según la empresa, en este proyecto “se elimina”, es el riesgo de explosiones bajo tierra. Eduardo Gantz, quien descubrió el mineral, explica que cuando se hace minería subterránea, “al abrir una galería en el macizo de carbón, le entra oxígeno y, producto de las presiones a las que está sometido, al meterse el aire en una relación que no refrigera sino que solo hace aporte de oxígeno, empieza a subir la temperatura y el carbón comienza a destilar gases”.
Respecto de posibles explosiones subterráneas en el lugar, tanto Mario Pino, como el gerente de proyecto, Cristián Barrientos Parant, sostienen que “lo que controla el fuego es la cantidad de oxígeno que se deja entrar, y si se quiere apagar el fuego, bastaría con cerrar la llave de aire”.
En cuanto a los cambios en la superficie, producto del vacío que se producirá al quemar el panel de carbón de 600 metros de largo por 30 de ancho y 10 de alto, en la prueba piloto, Barrientos señala que los cálculos geotécnicos indican que en los 300 metros que hay entre la superficie y el bloque no surtirá cambios mayores en el suelo.
PREOCUPACIÓN CIUDADANA
En Máfil existe preocupación entre sus habitantes, quienes dicen no sentirse correctamente informados de las implicancias del proyecto. Temen por datos que relacionan la explotación del carbón con emanaciones de azufre y consecuencias para la salud, como la lluvia ácida.
La empresa ha expresado que esto no será así, puesto que se trata de un proyecto piloto, donde la combustión del mineral, de tipo subbituminoso, se hará bajo tierra. Además, han dejado en claro que los carbones de Mulpún y su nivel de azufre están bajo el 0,8%, información que corroboró Pino, quien indicó que “este carbón, al ser bajo en azufres y metales trazas, las emisiones son bajas” aunque “al obtener energía siempre habrá un efecto sobre el medioambiente, el tema es que hay proyectos más y menos contaminantes”.
La Conama (Comisión Nacional del Medio Ambiente) convocó a una reunión el día 18 de marzo del 2010, donde se invitó a los organismos públicos para informar detalles del proyecto, sin embargo, la invitación no cursó a toda la comunidad.
Según se describe en el proyecto se producirán, entre otros, las siguientes emisiones: 51 kilos de dióxido de azufre (SO2) por hora y 12.500 kilos de CO2 por hora. A tres kilómetros del emplazamiento existe una escuela rural, detalle no presente en la DIA (Declaración de Impacto Ambiental), cuyos antecedentes fueron presentados recién el día de aprobación de la misma.
Consultado el ex director de la Conadi regional, Mauricio Huenulef, señaló que si bien la empresa tuvo reuniones con representantes del pueblo mapuche del sector, estas no fueron convocadas por la Conadi (Corporación Nacional de Desarrollo Indígena). En la Adenda presentada al proyecto, Huenulef señala:
“Considerando que el proyecto piloto se ubica cercano a la comunidad Huemal Curin, generando preocupación en los habitantes de esta comunidad, quienes corresponden a población protegida por leyes especiales, se le solicita al titular entregar mayor información respecto a la implementación de estas mesas de trabajo citadas, indicando: Participantes, entidades representativas, acciones convenidas y finalidad, formas y plazos de solución a los intereses y aprehensiones de la comunidad que tengan relación con el proyecto en cuestión. Esta solicitud se hace considerando el derecho a la información y participación establecidas en el Convenio 169 de la OIT sobre Pueblos Indígenas y Tribales en países independientes, particularmente en sus artículos 6 y 7”.
La empresa indicó los detalles de la relación que existe entre la comunidad Huemal Curin y Mulpun Energy. Por su parte, el historiador y coordinador del programa de ciudadanía del Observatorio Ciudadano, José Araya, indicó que se intentó poner un recurso de protección pero que las comunidades del sector desistieron y el plazo para hacerlo ya pasó.
En tanto la alcaldesa de la comuna de Máfil, Moira Henzi, indicó que “estamos en un acercamiento entre la empresa y la comunidad, queremos que todo sea transparente y se resuelvan las dudas; la empresa ha ido varias veces al concejo y el tema de las compensaciones y otros es claramente un proceso”.
Consultado Araya respecto a la falta de información que dice tener la comunidad, señaló que el problema radicaría en que “al ingresar el proyecto al sistema de evaluación ambiental, con una declaración de impacto ambiental, no hay participación ciudadana e información a la comunidad”, lo que calificó como otra más de “las falencias de la institucionalidad chilena” en materia ambiental.
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El intendente de la región de Los Ríos, Juan Andrés Varas, expresó que se le solicitó a la compañía un monitoreo exhaustivo de las variables que puedan afectar el modo de vida de los habitantes del sector, agregando que se solicitó un monitoreo químico del suelo, aire y agua. “De manera que tendremos claridad sobre la calidad de las aguas, tierra y el aire durante todo el período de duración del proyecto. Y en el caso de las aguas y suelos por un año después de que cese el proyecto”.
Pero, para José Araya, el problema de fondo es otro: “Cuál va a ser el papel de la región de Los Ríos en el desarrollo de la matriz energética, cuáles son los tipos de proyectos que son más adecuados con la realidad ambiental y productiva de la Región, lo que es parte de la estrategia de desarrollo regional, cuya discusión parece haber sido dejada en segundo plano”.
CÓMO OPERA Y LO QUE VIENE
“Esto es un plan piloto que tiene como objetivo gasificar un panel de carbón que es una parte menor del yacimiento; la idea es sacar el gas y caracterizarlo. Vamos a determinar qué nivel de volumen va a dejar un panel de este tipo, el nivel de seguridad y el tipo exacto de combustible que vamos a obtener”, señaló Barrientos Parant, quien cuenta que luego se va a traer una máquina capaz de convertir el gas en electricidad y que pueda generar, inicialmente, unos 5 megawats para ser llevados al SIC (Sistema Interconectado Central). Pero esto no acaba aquí, el proyecto de Mulpun Energy se podría asociar al uso eficiente de la energía residual para el desarrollo de invernaderos, mejorando la productividad agrícola del sector y entregando nuevas plazas de empleo a los habitantes de Máfil.
Otro de los posibles usos del gas obtenido es que sirva para hacer gas ciudad pero, como dicen los entendidos, “para ello primero debe entrar en operaciones la planta piloto”, lo que debe suceder, según la empresa, “entre octubre y noviembre de 2011”.
Finalmente, Eduardo Gantz, indicó que el mineral catastrado a la fecha, del orden de 100 millones de toneladas como recurso, puede llegar con las prospecciones a unos 150 millones de toneladas y más”.
Por Bruno Sommer
Fotografía: Cristián Barrientos, Gerente del Proyecto Mulpun Energy y maqueta de instalación.
El Ciudadano N°91, segunda quincena noviembre 2010